Aunque el Índice de Paz México 2019 del Instituto para la Economía y la Paz (IEP) reconoció a Campeche como la entidad con la menor incidencia delictiva y una de las pacíficas del país, César Gutiérrez Priego, especialista en Derecho Militar y Seguridad Nacional, advierte que, de no frenar la ola de violencia que se desató recientemente, sólo quedará el recuerdo de presumir que un día fue una de las entidades más seguras.
El experto expuso que el Gobernador Carlos Aysa González y los gobiernos locales tienen que poner empeño en proteger al estado, porque desafortunadamente el alto número de delitos que va en aumento podrían quitarle el título de “el más tranquilo” para el 2021.
“A Campeche lo descuidaron las autoridades y se durmieron en sus laureles, además durante la contingencia relajaron las medidas de seguridad; en ese momento posiblemente cárteles como, Del Golfo, Jalisco Nueva Generación (JNG) y del Noreste entraron a operar para proteger la ruta del narcotráfico”, narró Gutiérrez Priego.
Especificó que es fundamental que el gobierno local y estatal trabajen en la prevención del delito, “esto es preocupante porque la reacción por parte de la policía no ha sido tan contundente como se esperaría; ahora que ya vienen las campañas políticas el panorama ha sido aprovechado por los grupos delincuenciales, pero esta situación puede salirse de control al grado que de no evitarlo será imposible revertirlo”.
Coordinación, no sumisión
Luego del repunte de las ejecuciones en Ciudad del Carmen, ligadas a la distribución de narcóticos que ha reportado la Fiscalía General del Estado (FGE), César Gutiérrez planteó al presidente municipal Óscar Rosas González que debe perder el miedo de buscar el apoyo del gobierno estatal y federal.
“Buscar la coordinación no significa sumisión, ya que debemos entender que lo importante para un político que representa un estado y municipio es que los gobernados tengan las necesidades básicas, como lo es la seguridad”, citó.
Explicó que a la gente no le gusta ver a la Guardia Nacional (GN) o al Ejército en las calles porque se crea una percepción de inseguridad, pero esas cuestiones resultan disuasivas para los criminales, porque saben que no es lo mismo enfrentarse contra un Policía Municipal que no tiene la misma preparación, a desafiar a un elemento de la GN de la Secretaría de Marina (Semar).
Gutiérrez Priego consideró que la forma en que se debe dar certeza jurídica a la ciudadanía es que los funcionarios trabajen en la prevención de los delitos.
“Desafortunadamente en México no hemos aprendido a hacerlo, perseguimos delitos una vez que ya han sido consumados”.
Ruta de la droga
El también abogado penalista precisó que las organizaciones criminales que tienen el mando en el país intentan entrar a estados como Campeche, por ser una ruta hacía Cancún, Quintana Roo para el trasiego de drogas.
“Una de sus estrategias es observar la capacidad de la policía estatal y municipal y reclutar grupos menores de delincuentes para fortalecer su operación. La policía local ha tenido conocimiento sobre los grupos regionales que ya lideraban, pero si llega el Cartel del Golfo o el Cártel del Noreste la forma de trabajo es distinta, no se acerca al nivel de violencia a la que están acostumbrados”, detalló.
Ahondó en que los estados y municipios no quieren aceptar el hecho de que no pueden con la inseguridad y tratan de cuidar las cifras, por ello manejan los casos de delincuencia como si fueran hechos aislados. Sin embargo, la operación de las células criminales los ha superado porque Campeche tiene menor número de fuerzas militares y eso lo aprovechan los narcotraficantes, “siempre van tres pasos adelante”.
Las autoridades deben fortalecer sus estrategias para controlar las disputas porque los grupos criminales intentan desestabilizar ciudades como la Isla, para infundir terror y crear caos con ataques más agresivos entre ellos, expresó.
Por La Redacción