Teniendo en su primera vista puras ruinas, el pueblo Real de Salinas es considerado el pueblo fantasma de Campeche, debido a que fue deshabitado por sus pobladores por una maldición.
Ubicado a unos 10 kilómetros de Celestún, Yucatán cerca de los manglares, se puede observar los vestigios de una civilización que en su momento fue próspera, sin embargo, sus habitantes fueron muriendo poco a poco y los que quedaron prefirieron abandonar sus hogares.
En la actualidad sólo se puede ver ruinas de casas y edificios, y para acceder a él tienes que partir de Celestún, tomar una vereda entre los manglares, apoyado de un todo terreno y con un guía a tu lado, pues es muy fácil perderse en el lugar, aún con GPS.
Cuando llegas al pueblo, lo primero que puedes encontrarte es una capilla en ruinas y sin techo; cruzando la explanada se pueden observar las desgastadas casas y en la entrada un texto escrito en la pared, que da vestigios de la maldición que se “auto-lanzó" en el lugar.
“Bienvenidos señores visitantes a este su pueblo en ruinas a causa de los señores concesionarios del vecino puerto de Celestún que no dan trabajo a los que radican aquí”.
Según cuentan, cuando se desplomó el auge salinero en la década de los 70´s la población de Celestún, se negaba a darle trabajo a los habitantes de Real de Salinas, mejor conocidos por “Campechanos”, e incluso algunos tenderos les negaban la venta de provisiones.
Con información de México desconocido
SY