De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria, realizado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), los reclusorios de Carmen y de Kobén, a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado, obtuvieron calificaciones menores comparadas con las de otros, en cuanto al respeto de los derechos de sus internos.
Dicha cifra realizada por personal de derechos humanos puso al Centro de Reinserción Social de Ciudad del Carmen con una calificación de 5.90, mientras el Centro de Reinserción Social de San Francisco Kobén con 6.63, cifras en margen de “reprobado” y “regular” respectivamente, lo cual revela una tendencia baja en cuanto a la garantía de un trato digno a los sentenciados.
No obstante, de acuerdo con datos aportados por la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), y la Secretaría de Gobernación (Segob), la capacidad en el centro penitenciario de San Francisco Kobén es de mil 400 internos, capacidad completa hasta el año 2021, mientras que en Carmen es de 428, éste último está a un 90 por ciento de ocupación.
De acuerdo con la Ley de Ingresos y Egresos para el Estado de Campeche 2021, publicado en el Periódico Oficial el 29 de diciembre de 2020, se asignó para el programa de Reinserción a la sociedad de la población interna y liberada de los Centros Penitenciarios y Centro de Internamiento para Adolescentes en el Estado, un monto de 85 millones 202 mil 192 pesos, de los cuales, 71 millones 301 mil 186 corresponden para proporcionar alimentación a las PPL del Cereso y las condiciones mínimas de seguridad al interior de ambos reclusorios.
Con base en lo anterior, se verificaron las condiciones de estancia e internamiento de las personas procesadas y sentenciadas, al ponderar, ante todo, el respeto y la observancia a los Derechos Humanos, donde la penitenciaria carmelita tiene focos rojos en tres rubros: Aspectos que garantizan la integridad personal del interno, Aspectos que garantizan una estancia digna y Condiciones de gobernabilidad.
En cuanto a los aspectos que garantizan una estancia digna, la Comisión Nacional observó en Carmen deficiencias en los servicios de salud, insuficiencia de vías para la remisión de quejas de probables violaciones a los derechos humanos y supervisión del funcionamiento del centro por parte del titular.
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También en ese centro penitenciario hay faltas en la alimentación, condiciones materiales e higiene de instalaciones para alojar a las personas privadas de la libertad, área médica regular e insuficiencia o inexistencia de instalaciones necesarias para el funcionamiento del centro.
JG