Empresas privadas han iniciado con la construcción y venta de lotes del complejo turístico denominado “Tulumcito Pueblo”, en la playa ubicada en el kilómetro 21.5 de la carretera federal 180, tramo Carmen-Puerto Real, sin contar con la aprobación de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), y pese a que el proyecto ingresado a la Dirección General de Impacto y Riesgo Ecológico (DGIRA) de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el pasado mes de junio, contempla el daño al ecosistema de 9.2 hectáreas de manglares y 47 hectáreas de selva en el Área Natural Protegida de Flora y Fauna Laguna de Términos (ANPFFLT).
Este desarrollo turístico es fomentado por el alcalde Óscar Rosas González desde diciembre de 2020, se trata de una inversión privada por parte de las empresas Melbourne Desarrolladora Inmobiliaria y Manhattan Bienes Raíces Peninsulares, que de acuerdo con el Registro Público del Comercio (RPC) pertenecen al exsecretario de turismo estatal, Luis Augusto García Rosado, de 2009 a 2013, cuando renunció para sumarse al gabinete del expresidente Enrique Peña Nieto en el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM).
Hace siete años, en 2014, estas mismas empresas fueron las responsables de la construcción del Carmen Country Club y del edificio Country Olas, para los cuales también se afectó al Área Natural Protegida con el dragado de la Laguna Matamoros.
La Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del nuevo proyecto llamado “Tulumcito” fue ingresada ante DGIRA de la Semarnat el pasado 22 de junio con el número de expediente 04CA2021UD022, pero desde principios de este año había iniciado la venta de membresías para casas de playas y lotes.
Destruirán la selva
El documento revela que, aunque se hará un complejo turístico en la franja de playa del kilómetro 21.5 de la carretera federal, las obras también abarcarán una superficie hacia la Laguna de Términos que incluye “el cambio de uso de suelo forestal”, pero para actividades industriales ajenas a la actividad turística.
“En el desarrollo se pretende su división en lotes de diferentes medidas dependiendo de las necesidades de los compradores. El desarrollo Inmobiliario se denomina Mixto, ya que los lotes se pretenden vender a empresas nacionales e internacionales para el establecimiento de un Parque Industrial, mismo que contendrá bodegas, oficinas, comercios y negocios de apoyo”, señala el escrito elaborado.
Las empresas inmobiliarias no se harán responsables de las actividades que lleven a cabo sus compradores en esos lotes, pues indica que una vez definida la delimitación de los espacios y el cambio de uso de suelo, “no estarán sujetos al presente estudio, sino que los adquirientes realizarán los trámites correspondientes a las construcciones al interior”.
Aunque proponen supuestas acciones de mitigación, reconocen que se afectarán 47.3 hectáreas de Selva Mediana Subperennifolia, de los cuales 12.8 son de dominancia arbustiva y 34.5 de dominancia arbórea, además de 9.2 hectáreas de manglar y la explotación de un banco de material de 2.3 hectáreas.
Sin que les sea aprobado el impacto ecológico dentro del Área Natural Protegida Laguna de Términos, la venta ya ha iniciado a precios exorbitantes para las primeras 10 hectáreas sobre la playa, se trata de palapas que costarán un millón 198 mil pesos el edificio de una recámara, dos recámaras un millón 798 mil pesos, y tres recámaras dos millones 699 mil pesos, de acuerdo con información proporcionada por los propios agentes inmobiliarios.
Además de ello, se debe pagar una membresía de 50 mil pesos o Membresía Cliente Melbourne de 25 mil pesos, y un mantenimiento de membresía de mil 500 pesos mensuales.
Advertencia
Al respecto, el biólogo Moisés Rosas González, de la Dirección Regional de Planicie Costera y Golfo de México, de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), consideró que este proyecto implicará daños al medio ambiente en el corto plazo, principalmente la erosión costera que puede presentarse en un lapso de dos o tres años, además de inhibir el arribo de tortugas para desovar en la plata, por la desorientación que causa el uso de luces artificiales y la interrupción del flujo hídrico en la zona.
Señaló que es complicado “valorar de manera inmediata el daño que actualmente se le causa al ecosistema de manglares”, ya que tarda tiempo en manifestarse ya que son muy resistentes, para que se pierda el manglar tiene que pasar un proceso; sin embargo, la construcción de inmuebles en esas áreas “va a generar un problema a corto plazo”.
Ilegalidad
Por su parte, el encargado de la Oficina Regional de la Semarnat en Ciudad del Carmen, Ramón Jesús Martínez Beberaje, refirió que al no contar con la autorización de la MIA, no se puede iniciar ni la construcción ni la venta de ningún lote en el proyecto turístico “Tulumcito Pueblo”.
Son dos proyectos de MIA-Particular ingresados a la Semarnat, uno como “Construcción y operación del desarrollo inmobiliario mixto 21.5 en Ciudad del Carmen, Campeche”, que incluye el impacto a la selva y mangle, con la clave 04CA2021UD022, el 22 de junio; y otro presentado como “Construcción y operación de desarrollo turístico Tulumcito”, con clave 04CA2021TD024 del 29 de junio. Para ambos casos se tiene 60 días hábiles para emitir la resolución correspondiente.
El encargado de la Oficina Regional dijo que ambos proyectos están en Proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (PEIA), que se lleva a cabo para “evaluar el proyecto y el contenido del mismo y dar una resolución en función de los aspectos sociales, ambientales y ecológicos”.
Por ello, puntualizó que “al estar en proceso de evaluación dicho desarrollo no se puede construir, no se debe de empezar ninguna construcción si no se cuenta con la autorización correspondiente, ya que previo al inicio de cualquier acto en dicha zona se debe de contar con la Manifestación de Impacto Ambiental debidamente aprobada”.
Incluso, la autorización puede demorar más de 60 días hábiles si al proyecto se le pide información complementaria, para ello se les da un periodo de 40 días extras para que presenten la información requerida y una vez presentada se reanuda el proceso de evaluación, subrayó.
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Martínez Beberaje precisó que, para la aprobación de la MIA se debe evaluar en qué unidad se encuentra el proyecto, “la unidad de criterios de acuerdo a la zonificación delÁrea Natural Protegida de Flora y Fauna de la Laguna de Términos, por lo que el proyecto debe de ajustarse a esos criterios de manejo”.
GH