La falta de acceso a diferentes fuentes de energía eléctrica o combustible en zonas rurales del país puede también poner en riesgo la salud de los que habitan estos hogares. Este escenario social es conocido como “pobreza energética” y en México se estima que casi el 14 por ciento de los hogares cumplen esta condición socioeconómica.
La pobreza energética se define como “describir ciertas carencias que sufren tanto los hogares como las personas, ya sea por un gasto excesivo en esos bienes o servicios o por una falta de ingreso para poder adquirirlos”, aunque no existe una definición universal para el término, según advierte un estudio realizado por la organización México Evalúa publicado en 2021.
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En México, la organización argumenta que las brechas de ingreso económico, educación, salud y vivienda, así como carencias en los organismos centrales de energéticos cubren a toda la población.
“En cuanto al tema eléctrico, aunque las cifras oficiales apuntan a que en 2018, 1.25% de la población nacional –cerca de dos millones de mexicanos– no tuvieron la posibilidad de conectarse a una red eléctrica (…) un 36.7% de los hogares en México sufren pobreza energética. Es decir, a cifras actuales, aproximadamente 46.6 millones de mexicanos no tienen un acceso pleno a energéticos de calidad, ya sean combustibles o electricidad”, menciona el informe.
Según cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), en la región de la Península de Yucatán existen 372 mil 161 hogares que aún usan leña para cocinar los alimentos. A nivel nacional, la cifra se traduce en 4 millones 855 mil 311 casas que no pueden y no tienen acceso a la compra de una estufa de gas u hornilla eléctrica.
Los números señalan que Campeche cuenta con 76 mil hogares que aún usan carbón (o alguna variante) para preparar la comida. De este total, el 94 por ciento cuenta con una chimenea donde pueda salir el humo al exterior.
En esta Entidad existe una tradición de leñadores, pues hay varias zonas del interior campechano donde el principal ingreso de los hogares es la tala legal o ilegal, como POR ESTO! ha hecho registro en diferentes ocasiones.
Durante marzo, este medio consignó los riesgos sobre los talamontes que son orillados por grupos criminales para obtener madera fina de caoba, jabín o granadillo y hasta mil pesos les pagan por día. Según datos del Inegi, también presentados por México Evalúa, el ingreso promedio de una familia de Campeche es de 47 mil 276 pesos por trimestre.
De los 260 mil hogares, se estima que el 29.2 por ciento usa aún madera como principal fuente de energía y calor.
En Quintana Roo, zona turística del Caribe, hay 85 mil 312 casas que utilizan un fogón, de estas 77 mil 529 tienen un ducto para expedir el humo.
El ingreso promedio de las familias en Quintana Roo es de 46 mil 380, trimestral, y una población de 549 mil personas que tienen acceso a la energía eléctrica. Según datos del Inegi, de los 575 mil 489 hogares quintanarroenses, un 14.8 por ciento aún usa leña como medio de iluminación o calor.
La Entidad que presenta mayor brecha energética es Yucatán. Para el acceso a la alimentación, 210 mil 762 casas utilizan carbón para cocinar, de estas el 91 por ciento tiene una chimenea (191 mil 825 hogares).
La Entidad tiene el uso más elevado de leña en los hogares (32 por ciento) de una población de 658 mil 85 casas. Se estima que de la población de 2 millones 320 mil personas, 633 mil 199 tiene acceso a la energía eléctrica.
Daños a la salud
No sólo es la incomodidad y dificultad económica para acceder a las alternativas de energía en los hogares, también existe un riesgo para la salud en el uso de carbón o madera para cocinar o alumbrarse.
“En México, el 11.3% de los hogares recurre al uso de la leña como su principal energético para cocinar. Este porcentaje representa cerca de 13.5 millones de personas del total de la población en México, en 2018 (…) Aquellos mexicanos que utilizan leña son más susceptibles a sufrir EPOC, padecimiento muy común en México, y un problema relevante para los hogares en pobreza energética. Según la Secretaría de Salud (2016), alrededor del 10% de los mexicanos padecen EPOC”, registra el informe.
El EPOC es una enfermedad principalmente relacionada con las personas que fuman cigarrillos; sin embargo, la quema de madera puede ser diagnosticada “por limitación al flujo aéreo, la cual no es completamente reversible. La limitación al flujo aéreo es comúnmente progresiva y se asocia con una respuesta inflamatoria anormal de los pulmones por la exposición a partículas nocivas y gases”, según la Secretaría de Salud.
Hasta la doceava semana epidemiológica del 2022, la Secretaría de Salud reportaba que en Campeche había atendido a seis personas por intoxicación por monóxido de carbono, además de haber reportado otras seis personas atendidas en 2021.
En Yucatán han sido rescatadas siete, tres mujeres y cuatro hombres en lo que va de este año; además de otros seis pacientes. Finalmente, en Quintana Roo se han atendido 49 pacientes este 2022 y 28 más el año pasado.
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CG