El municipio de Carmen carece de cultura sísmica, así como de una reglamentación acorde al tipo de subsuelo que tiene, lo cual representa un riesgo para la población dado que Ciudad del Carmen se encuentra en el perímetro de daños de sismos cuyos epicentros son la zona costera de Chiapas, a unos 500 kilómetros de distancia, y que últimamente las construcciones son verticales, señaló Leonardo Palemón Arcos, delegado de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Sísmica (SMIS) en Campeche, y presidente del Colegio de Ingenieros de Ciudad del Carmen, quien agrega que se debe actualizar la reglamentación existente.
Aunque la población de Carmen no sintió el sismo de magnitud 3.6 que se registró a las 6:03 horas del 25 de septiembre de 2017 al noroeste de Ciudad del Carmen, el fenómeno ocurrió en aguas del Golfo de México, a 147 kilómetros de la ciudad, cerca de Cayo Arcas, a una profundidad de cinco kilómetros.
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Palemón Arcos señaló que anteriormente no había tanta tecnología y redes sociales para saber de manera inmediata lo que pasaba, “pero nosotros tenemos evidencia de que ha temblado en Ciudad del Carmen; tenemos entrevistas de personas que han vivido hace mucho acá”.
Añadió que como SMIS en Campeche el objetivo es contribuir a educar, contribuir con los reglamentos para tener estructuras de mayor seguridad “porque actualmente no tenemos esa cultura sismológica; cuando sucedió el temblor de 2017 lo que mucha gente hizo es salir de sus casas a las calles y empezar a rezar”.
Reiteró que en Carmen tampoco se tiene esa cultura e incluso en los reglamentos no lo contemplan, “compañeros y expertos han mencionado que la cultura es muy incipiente; entonces, el objetivo es fortalecer los reglamentos para garantizar la seguridad estructural y los beneficios serán para la sociedad”.
Puntualizó que Ciudad del Carmen definitivamente está en zona de riesgo, a escasos 400 kilómetros de los epicentros en Chiapas, donde se esperan más sismos que van a tener efecto sobre la Isla dado el subsuelo que tiene, y mientras más cerca sea el epicentro el daño que podría generar es muy factible.
El igual catedrático en la Facultad de Ingeniería de la Unacar dijo que las autoridades deben poner especial atención en estos reglamentos, pues en el municipio no existen controles al respecto “y sabemos que las construcciones que se están haciendo últimamente son verticales y esa verticalidad implica mayor riesgo para la cimentación porque no estamos preparados para ello”.
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JG