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Fiscalía de Estados Unidos solicita cadena perpetua para Genaro García Luna
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Luego del doble flamazo que se registró al interior de una rosticería localizada en la colonia Renovación tercera sección de Ciudad del Carmen, se informó que fueron un total de cinco personas que resultaron con quemaduras de segundo y tercer grado de las cuales cuatro se tratan de trabajadores directos y uno más un vecino que trató de ayudar al momento del accidente.
Los trabajadores indicaron que se encuentran recibiendo atención hospitalaria al interior de una clínica particular y que el propietario de la rosticería se encuentra cubriendo los gastos médicos; la dirección de Protección Civil indica que el comercio se encuentra clausurado y el Ministerio Público ya se encuentra integrando las carpetas de investigación en contra del propietario.
Se trata de Claudia Martínez de 32 años de edad, quien se desempeña cómo cajera; Eduardo Sánchez de 43 años de edad, quien se desempeña como cocinero; Martín Herrera de 23 años de edad, quien se desempeña como ayudante general y Edder Sánchez de 20 años de edad, quien de igual manera es ayudante del comercio.
Los cuales, como se recordará, la mañana del pasado miércoles alrededor de las 10:00 horas se encontraban al interior de la rosticería denominada Los Jarochos ubicada sobre la avenida Puerto del Carmen esquina con contadores de la demarcación antes mencionada.
Cuando por la falta de mantenimiento en las tuberías donde se conduce el gas LP que es utilizado para rostizar los pollos tuviera una fuga y provocara dos flamazos ocasionando que cuatro trabajadores directos resultaran lesionados.
En la desesperación del fuego, un vecino intentó ayudar, sin embargo, resultó con quemaduras leves por lo que de igual manera en compañía de los otros cuatro sujetos fue llevado a bordo de ambulancias de la agrupación bomberos tácticos a una conocida clínica particular.
La ciudadana de 32 años de edad, quien se identificó como Claudia Martínez, mencionó que actualmente aún se encuentra recibiendo atención médica al interior de esta clínica particular, ya que sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en diferentes partes del cuerpo ya que en ese momento se encontraba muy cerca donde se registró el primer flamazo en sí.
“Me encontraba cerca de la caja registradora y del lugar donde los pollos son rostizados cuando escuché un fuerte ruido y al momento de voltear a ver, vi como el fuego venía directamente hacia mí y ya no pude hacer nada más al respecto” fueron las palabras de la mujer afectada.
También mencionó que los propietarios del local se encuentran al pendiente del estado de salud de ella y de todos sus compañeros y que les han indicado que esperarán hay que se recuperen al 100% para ser reinstalado en sus puestos de trabajo que no lo perderán y que ellos pagarán todos los gastos que sean necesarios para su rehabilitación.
Mientras que el joven Martín Herrera, originario de Escárcega, Campeche, quien se desempeña como ayudante general y que apenas tenía una semana y media de haber iniciado labores en este comercio, sufrió de quemaduras menores, sin embargo, al igual que sus compañeros persiste internado en la clínica mientras los doctores dan de alta una vez que digan ya no exista ningún tipo de riesgo para su salud.
Indicó que al principio estaba muy nervioso y preocupado por lo que pudiera haber sucedido después del flamazo, ya que temía perder su trabajo y que nadie pagará sus lesiones que sufrió, pues él es de otro municipio y en la ciudad no cuenta con muchos familiares que pudieran apoyarlo en estos momentos.
Cabe señalar que a pesar de que se intentó contactar al vecino afectado y al propietario para preguntar sobre las acciones que se llevarán a cabo para evitar algún otro tipo de accidente o si pagará los daños que ocasionó a predios vecinos, ambos se negaron a hablar y dar más datos por cuestiones de seguridad.
Sin embargo, el director de Protección Civil y de ordenamiento vial, Julio Villanueva Peña, dio a conocer que actualmente el comercio se encuentra clausurado de manera preventiva a la espera que el propietario se ponga en contacto con ellos para iniciar el proceso de regularización correspondiente, ya que presuntamente no contaba con ningún tipo de documentos actualizados.
En inspección rápida que se realizó al momento del accidente se descubrió que no contaban con ningún extintor que pudieran haber utilizado de manera preventiva en ese momento. De igual forma no contaban con salidas de emergencia rápidas ni mucho menos un tanque cilíndrico de agua que debería de ser utilizado para este tipo de accidentes en este tipo de locales.
Mientras que las investigaciones complementarias son llevadas a cabo por el ministerio público de Ciudad del Carmen y ellos serán los encargados de recibir las denuncias que pudieran registrarse en contra del propietario de la rosticería por lesiones calificadas, daño a propiedad privada más lo que resulte, de la cual hasta el momento no se ha registrado ninguna.
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CC