Los próximos 10 días los diferentes cementerios de Campeche comenzarán a recibir mantenimiento previo a la celebración de los ‘fieles difuntos’, informó el director de servicios públicos de la comuna capitalina, José Rivero Arroyo, sumado a que, pidió a los ciudadanos a no dejar recipientes de agua en los panteones, ya que, estos podrían servir de criaderos para el mosco transmisor del Dengue.
Noticia destacada
Sindicalizados del Poder Judicial de la Federación en Campeche se unen a la protesta nacional
Noticia destacada
Roban por tercera ocasión un kínder en Campeche; se llevaron bocinas y proyectores
“Tenemos dos semanas de mucho trabajo para que el ciudadano que vaya a visitar a sus familiares que tienen sepultados, se encuentre un panteón, quizás no de lujo, pero sí bonito y con el menor riesgo posible de que pueda tener algo ahí, una yerba o algo que pueda lastimarles”, dijo.
Adelantó que, los trabajos de mantenimiento en los panteones, que son responsabilidad del Municipio, comenzarán con labores de limpieza este jueves y viernes en el cementerio de San Román, mientras que viernes y sábado en el de Samulá.
En la siguiente semana, lunes, martes y miércoles será intervenido el panteón de Siglo XXI, que adelantó, dadas sus dimensiones geográficas, será necesario meter más gente que trabaje en el inmueble, mientras que jueves y viernes el panteón de Santa Lucía, ambos en cuanto a temas de limpieza.
Explicó que, la semana previo al día uno y dos de noviembre, en todos los cementerios serán realizados trabajos de mantenimiento menor, entre los que están previstos de resane, caleo, pintura de guarniciones, y poda de aquellos árboles o raíces que puedan afectar la estructura de los panteones.
Respecto al tema de las tumbas abandonadas, Rivero Arroyo adelantó que harán una solicitud y requerimiento al área correspondiente para la elaboración de tapas y que estas sean colocadas en las tumbas para no tener restos humanos expuestos, esto por cuestiones higiénicas para los visitantes.
“Los trabajadores del panteón le dan un mantenimiento ligero, que es evitar que se produzca yerba o maleza, pero hasta ahí llega nuestra responsabilidad, porque al final de cuentas es de alguien que, quizás, no lo ha visitado en diez años, pero puede ocurrir que en diez años más aparezca el dueño”, concluyó.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
LV