De los casi 32 pacientes nuevos que el Sistema de Atención a Niños, Niñas y Adolescentes Farmacodependientes recibe al mes, el 20 por ciento corresponde a mujeres víctimas de violencia que son canalizadas tanto a este espacio como al hospital Psiquiátrico de Campeche, para recibir atención por presentar problemas como depresión y ansiedad, informaron Neyda Sosa Cahuich y Concepción del Carmen Pérez Lara, directora y jefa del área de trabajo social del Sannafarm, respectivamente.
La directora de la institución expuso que desde el 2016 se abrió el espacio denominado “Luz de vida” donde no solo se brinda atención a niños y jóvenes sino también a adultos. Agregó que Sannafarm continúa con el objetivo de trabajar en términos de la prevención y añadió que en el acuerdo de creación, este organismo debe brindar atención a personas de nueve a 60 años de edad, pero con el proceso de transición se ampliará de cinco a 65 años o hasta el tiempo que lo requiera, ya que consideró que no debe depende de la edad, sino del tiempo que le tome la recuperación.
Por su parte, la responsable del área de trabajo social, detalló que al mes abren casi 32 nuevos expedientes de pacientes, principalmente de población joven, así como de joven adulto que son canalizados a través del programa salud mental.
“Estamos hablando de depresión y ansiedad, ahorita estamos proporcionando los programas para este tipo de población”, y agregó que en el tema de atención a mujeres representan el 20 por ciento, mismas que son valoradas y de ser necesario son canalizadas también al hospital psiquiátrico de Campeche.
“Estas mujeres reciben doble tratamiento, por cuestión de diagnóstico con el especialista y con nosotros”, detalló, para luego añadir que se trata principalmente de población adulta joven, quienes en su mayoría presentan depresión y ansiedad.
De la misma forma, expuso que reciben a personas que presentan ideas de suicidio, quienes son valoradas y se canalizan para recibir tratamiento psiquiátrico, además de que entre los principales factores que provocan esa situación, es que son violentadas por sus parejas y por sus hijos, quienes registran alguna adicción.
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LV