Por incumplir con las medidas correspondientes, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Campeche ha realizado la suspensión de seis establecimientos bajo el giro de expendedoras de agua, ubicadas en Calkiní, Carmen y Campeche, confirmó José Baltazar Arceo, gerente de operación sanitaria.
De acuerdo con la norma, el agua debe estar libre de coliformes al tratarse de agua purificadas no potables. En las expendedoras el precio del garrafón de 20 litros cuesta de 7 a 10 pesos, mientras que las marcas del mercado, cuesta hasta 35 pesos, esa diferencia —dijo— hace que las personas acudan a esos establecimientos.
“Si tomamos muestras y salen con coliformes, hacemos una segunda toma por triplicado, el propietario tiene que llevar su muestra al laboratorio de salud pública, la Copriscam hace lo propio, y si sale positivo se hace otra muestra por quintuplicado y de esas, si salen tres malas aplica suspensión”, argumentó
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JY
