De 300 a mil pesos son las pérdidas de las huacaleritas del Mercado Principal “Pedro Sainz de Baranda” cuando las lluvias no las dejan trabajar o cuando hay suspensión de labores, tal como ocurrió durante el Huracán Beryl; venteras de masa, frutas, verduras, hortalizas, dulces y otros productos son las más afectadas.
En un recorrido de Por Esto! por el Mercado Principal, destacaron las pláticas con las venteras Norma Chuc y Adriana Puc, quienes indicaron que con las lluvias la gente no sale y tampoco llega a la central de abastos. “En las lluvias más fuertes de este año no pudimos laborar, nos quedamos sin ingreso ese día”, dijo.
Cabe recordar que en el Mercado Principal hay un número mayor a 150 vendedoras conocidas como huacaleritas, ubicadas al interior y en los linderos de la central de abastos. Estas comerciantes están caracterizadas por no tener un puesto fijo y, en ocasiones, caminan dentro del “Pedro Sainz de Baranda” para ofrecer sus productos a cada uno de los visitantes.
Dado lo anterior, otras huacaleritas, como Noemí de la Cruz y Gustaba Noh, señalaron que incluso les hace falta un toldo para poder laborar afuera del mercado: “ninguna autoridad nos vino a visitar cuando pegaron los mal tiempos de Alberto y Beryl, nosotros no trabajamos durante esos días”.
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Cabe agregar que las huacaleritas están divididas de la siguiente forma: en los linderos del Mercado Principal están ubicadas las vendedoras de frutas de temporada, por lo cual, en la actualidad, pueden ser encontrados productos como mango, nance, jícama, entre otras, ya sea cortados y listos para comer, así como con cáscara.
JGH
