Los pocos médicos tradicionales que existen en el municipio de Hopelchén confían que la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, les dé su lugar y su gobierno abone para el rescate y preservación de ese legado ancestral a través del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI).
Federico Castillo Nieves, médico tradicional originario de la comunidad de Bolonchén de Rejón y uno de los dos médicos indígenas que quedan en el edificio del ex Consejo Local de Médicos Indígenas Cheneros (Colmich), señaló que urge que las tres instancias de gobierno rescaten ese legado.
Mencionó por enésima vez que la medicina tradicional muy poco es usada y practicada por las nuevas generaciones, y “poco a poco”, se va perdiendo ese legado ancestral, pues ya poca gente pide los servicios de curanderos, yerbateros y hasta de parteras, y además las nuevas generaciones poco les interesa formar parte de la medicina tradicional.
Le pedimos a nuestra próxima presidenta de México que lo será a partir del próximo martes, que tome en cuenta nuestro clamor, nuestras demandas y que en su gobierno nos tome en cuenta y nos visite de ser posible y conozca de cerca nuestro trabajo.
Alzamos la mano como pueblo indígena maya de Los Chenes, para que Sheinbaum nos tome en cuenta y sepa que en Hopelchén aún subsiste la medicina tradicional a través del tiempo, y a pesar de las adversidades y dificultades para practicarla, estamos vivos y queremos que nuestro legado ancestral subsista por siempre.
Exhortó a Sheinbaum a tomar en cuenta su clamor y la invitó a que visite Hopelchén, y él mismo le hará una limpia con el dzibché, el arbusto, el laurel y otras yerbas que curan y alejan las malas vibras en las personas.
Castillo Nieves lamentó que el INPI, al menos en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, no hizo nada en favor de los pueblos indígenas, mucho menos le abonó al rescate y la preservación de la medicina tradicional; en pocas palabras, dijo que el INPI fue un cero a la izquierda para ellos como médicos tradicionales.
JGH