La caída de precios por la presión del libre mercado y la contaminación, han generado que se debilite la promesa de que el arroz de Campeche tiene potencial de crecimiento por su gran calidad. Y es que, la Entidad, por sus condiciones geográficas, es vista como un paraíso para el cultivo grano, no obstante el panorama es cada vez más desolador por la disminución de la producción y que algunos agricultores ahora buscan otras actividades para obtener ingreso, como la ganadería u otras.
En entrevista con uno de los principales productores del Estado, Francisco Arias Santana, afirmó que ha disminuido mucho la producción por el incremento de los costos, donde los medianos y grandes agricultores cambiaron de cultivo a algo más “rentable”, como a la ganadería. Lo anterior por la apertura de las fronteras para la importación que fue aprobada por el Gobierno Federal, que ahora es sin restricciones.
“Llega arroz barato de cualquier parte del mundo, eso hizo que la gente dejara el cultivo. Además, los apoyos de Seguridad Alimentaria Mexicana - Segalmex – solo son para pequeños productores de 30 hectáreas, solo reciben ayuda para 30 hectáreas, si tienes más, no hay más”, señaló en entrevista con Por Esto!.
Tres años de contrastes
En cuanto a la producción del arroz en Campeche, de acuerdo con el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), al corte del 31 de julio, en el Estado fueron sembradas tres mil 575 hectáreas, de las cuales ya se cosecharon mil 700. En el periodo mencionado la producción tiene un rendimiento de 10 mil 200 toneladas.
Todo indica que este año la producción tendrá otra disminución en el total de su producción al cierre de 2024. La producción en 2023 fue de 20 mil 785 toneladas y en 2022 de 46 mil toneladas. Debe recordarse que en 2022 Campeche fue el segundo estado de mayor producción en México
Cultivo en declive
De acuerdo con el productor, en Campeche quedan de 30 a 40 arroceros que están distribuidos en diversos puntos de la entidad, que tiene a tres de los principales municipios productores en Champotón, Escárcega y Palizada.
También abundó sobre los riesgos que afronta el sector, de forma principal por las plagas y enfermedades, que derivan de la lluvia ácida, por la contaminación de escapes de vehículos automotores y maquinarias, así como diversas construcciones que generan incidencia mayor de hongos y enfermedades.
Luego, precisó que el promedio de producción en la actualidad es de seis toneladas por hectárea y el pago del precio de garantía es en aproximado de ocho mil pesos por tonelada. “En general son hasta cinco mil pesos al productor y con el apoyo Federal llega a los ocho mil pesos”.
En México, el arroz palay se produce de forma distinta dependiendo de la región geográfica. En la zona Noroeste y Noreste se siembra de forma directa en la tierra, bajo riego; en el Centro-Sur por medio de trasplante bajo riego; mientras que en la zona Sureste, donde las lluvias son abundantes, se trata de un cultivo de temporal.
JY