Más de una tonelada de carne han tenido que tirar a la basura los 65 tablajeros que hay en el mercado “Alonso Felipe de Andrade”, tras descomponerse dos cuartos fríos, pues la capacidad de refrigeración se ve rebasada, lo que está representando severas pérdidas para los comerciantes.
De acuerdo a Javier Rosado Jiménez, el problema es que la administración del centro de abasto no hace mantenimiento y esto lleva a que cuando se rompen, las reparaciones son costosas y difíciles de solventar en breve tiempo, como este caso donde se requieren alrededor de 80 mil pesos.
Los carniceros del centro de abasto tienen asignados tres cuartos fríos para el resguardo del producto; sin embargo, hace 20 días colapsó y dejó de funcionar. Esa carne debe distribuirse en los restantes; lamentablemente el aumentar la demanda de frío, provocó que hace una semana, una de las dos máquinas del cuarto número uno se rompiera y esté a la mitad de su capacidad.
Debido a que se supera la capacidad de carne al interior de las cámaras de refrigeración, estos lugares no cumplen con su función y los carniceros ya registran pérdidas, pues en su mayoría, los 65 comerciantes han tenido que tirar producto, pues presenta mal olor y así no lo van a vender a la población.
Los expendedores de carne se dicen severamente afectados, porque tienen un estándar y compromiso de venta, pero ante la poca capacidad de refrigeración deben reducir la matanza, “pues no queremos invertir para luego perder, más ahora que desde hace un mes el kilogramo de cerdo pasó de 80 a 120 pesos”, y aunque pensaban que no llegarían a ese extremo, en las últimas dos semanas ya perdieron más de una tonelada de carne.
“Es crítica la situación, porque tenemos el producto caro y se nos rompen los cuartos fríos. Si existiera un programa de mantenimiento evitaríamos ese problema, esos equipos trabajan día y noche, debe existir un fondo económico para tenerlos en óptimas condiciones, porque como carniceros pagamos por ese servicio. No es lo mismo cambiar o limpiar una pieza a tener que comprar todo; hemos tirado producto, porque no queremos arriesgar la salud, en total ya echamos a la basura una tonelada de carne”, lamentó.
Rosado Jiménez agregó que la falta de un programa de mantenimiento, ha generado que los cuartos fríos sea el calvario de los carniceros, pues “le echan mano, ya que están rotos” y de acuerdo a la última reunión que sostuvieron con la administradora, les dijeron que reparar el cuarto frío número uno quedará listo hasta dentro de una semana y costará unos 80 mil pesos.
Por último, dijo que no es asunto menor que el mercado no tenga cámaras de refrigeración en buen estado, toda vez que muchos de los alimentos que se preparan en casas y hasta negocios son vendidos por comerciantes de este centro de abasto, por lo que no se puede poner en riesgo la salud de los carmelitas por no tener un programa de mantenimiento a los cuartos fríos.
GC