Padres y exalumnos bloquean acceso a preparatoria en Carmen para exigir certificados de estudio

Padres de familia y ex alumnos de la escuela preparatoria particular Lafayette protestaron a las puertas del plantel educativo en reclamo por la falta de la entrega del certificado de estudios, ya que los menores fueron dados de baja en su primer año de nivel superior. Ayer, en el colegio privado ubicado en la calle 35, exigieron la intervención de la gobernadora Layda Sansores San Román para dar respuesta a 27 jóvenes, pues la única opción que les dio la Secretaría de Educación fue que estudien la preparatoria abierta, pero eso no significó ayuda.

Tal como se informó en Por Esto, desde septiembre pasado los padres de familia habían denunciado el fraude de la institución educativa particular en Ciudad del Carmen y, a pesar de realizar diversas gestiones para destrabar el problema, Lafayette no cumplió con la entrega del certificado de estudios de sus hijos, pese a que pagaron cinco mil 900 pesos, entre diferentes servicios que según la escuela eran indispensables para la obtención del documento.

Visiblemente enojados por la estafa, los padres comentaron que este caso fue presentado como una estafa ante la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), y en breve acudirán a la Comisión de Derechos Humanos en Campeche, así como a la Fiscalía del Estado de Campeche, no solo por la falta de entrega del documento, sino también por la reparación del daño de todo lo que han perdido los jóvenes.

Señalaron que habían sido cautelosos con esta situación, haciendo las cosas conforme lo marcan los reglamentos de las instituciones. Tras la última reunión que sostuvieron con Celia Rodríguez Gil, coordinadora del Centro de Desarrollo Educativo y Enlace con la SEDUC en Carmen, esta les dijo que la única manera de que los podían apoyar era que estudiaran la preparatoria abierta. Sin embargo, a decir de los padres de familia, esto no es ayuda, porque de todas maneras tienen que seguir pagando y el tiempo no regresa.

De acuerdo a los afectados, a raíz de esta situación, en la escuela, les dijeron que les pagarían todo lo que cuesten los exámenes en la preparatoria abierta, sin embargo, no se quieren hacer responsables por los cinco mil 900 pesos que les cobraron por un certificado que jamás les entregaron. Por lo tanto, llegarán legalmente hasta las últimas consecuencias, independientemente de que piden la intervención de la Gobernadora, ante la falta de respuesta de la autoridad educativa en este caso de estafa.

Lamentaron que sean 27 estudiantes los que perdieron su primer año de licenciatura y que existan otros 60 alumnos en la actualidad que están en las mismas circunstancias y que la SEDUC siga sin suspender actividades, pues sería mayor el fraude cometido. Ellos como autoridad saben lo que está pasando en el colegio particular, sin que pongan un alto.