
Toribio de Jesús Pérez Díaz, trabajador que denunció hace un mes que no quisieron reconocerle su antigüedad de 23 años en Petróleos Mexicanos (PEMEX) para su jubilación por incapacidad permanente, se enfrenta a un nuevo problema, pues si bien su situación precaria lo obligó a aceptarla desde octubre del año pasado que el Hospital General emitió el dictamen médico-pericial, el departamento de la Región Marina Suroeste tardó cinco meses en mandar el oficio a la Sección 47 y por este motivo se ajustarán seis meses sin percepción salarial.
El hombre, que se encuentra severamente enfermo y con terribles problemas económicos, pide la intervención de la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, para que se agilice el pago de su salario y concluyan los trámites que por la burocracia se demoraron varios meses.
Luego de que Por Esto! diera a conocer la situación que enfrenta este extrabajador petrolero, con una afección en los pulmones dejándolo con fibrosis crónica pulmonar, principios de insuficiencia renal, neuropatía diabética pues casi no camina y usa silla de ruedas, a los casi seis meses de no tener ingresos y buscar a funcionarios para que agilicen su trámite, se enteró que todo, al parecer, se atrasó por desidia de PEMEX que no notificó a la Sección 47.

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Indicó que pese a que lo están jubilando con un régimen del cual no está de acuerdo, su situación precaria en la que no tiene ni para comer lo obligó a aceptar ese esquema del Afore con el fin de que le empiecen a pagar, pero ha pasado tanto tiempo y ni uno ni otro se ha concretado.
Mostró que, con fecha siete de octubre de 2024, el director del Hospital General de PEMEX, Adalberto Jiménez Santos y José Miguel Istilart Ríos, coordinador de Medicina del Trabajo, enviaron un oficio a Juan Alejandro Reyna Velázquez, jefe del Departamento de la RMSO, en el que daban cuenta del Dictamen Médico Pericial por Riesgo No Profesional del Trabajador para que le dieran el trámite, en este caso la jubilación por incapacidad laboral.
Desafortunadamente, Toribio Pérez Díaz dijo que desde entonces ya no le fueron emitidas incapacidades porque se suponía que ya debía recibir sus pagos, incluyendo el dinero de la Afore que es por 73 mil pesos, pero han pasado seis meses y no ha visto ni un peso; en cambio, asegura que sigue presionando para saber cuándo saldría su actualización laboral y se va enterando que apenas el 11 de marzo de este año José Alberto García Hernández, S.P.A. de la Jefatura del Departamento de Personal Carmen de la RMSO envió el oficio a José Antonio Toledo González, secretario general de la Sección 47.

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“Se están tirando la bolita tanto el Sindicato como la empresa y aquí el perjudicado soy yo, ellos tienen para sentarse en su mesa a tomar café con galletas, me quedé sin nada y ya han pasado seis meses de no percibir ingresos y sí tengo muchos gastos por mi condición de salud, lo poco o mucho que tenía de pertenencias de valor he tenido que venderlas para sobrevivir porque no tengo para cumplir con renta, agua, luz; mi hijo estudiaba informática en la Unacar y tuvo que salirse para ponerse a trabajar y echarme la mano a mi y a su mamá, sé que no está bien, pero no tenía alternativa, ya que ni siquiera podía darle para el pasaje de viaje a Ciudad del Carmen”, manifestó.
Pérez Díaz dijo que en su búsqueda de solución a este asunto que lo consume más que sus propias enfermedades, ha enviado correos electrónicos a la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para que agilice este proceso, pues ahora lo único que le urge es que le paguen lo que por ley le corresponde, pues la demora sucedió por una omisión burocrática.
“Fue más grande mi necesidad de hambre, no había de otra, no tengo para pagar un abogado que me defienda, tampoco puedo decir que tengo un capital guardado, pues con tantas enfermedades y viajar a México lo gasté todo porque pensé en salir adelante y que mi enfermedad no avanzaría más, pero no fue así”, concluyó.