Un elemento de la Guardia Nacional (GN) de nombre Jesús Cámara, que conducía su vehículo sobre la avenida Concordia arrolló a un motociclista que circulaba frente a él, pero al querer esquivar un bache fue impactado por la parte de atrás y arrojado al suelo en un charco de agua.
Testigos aseguran que el elemento de la Guardia Nacional conducía en estado de ebriedad y en ese momento discutía con su pareja, razón por la que no se percató del motociclista que iba delante de él y se produjo el accidente donde las pérdidas materiales fueron menores.
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Este percance ocurrió cobre la avenida Concordia entre las calles cinco y siete, desde donde los vecinos hicieron un llamado al 911 para solicitar el apoyo de la policía, pero al lugar nunca llegaron los oficiales.
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Al asistir al muchacho atropellado, los vecinos se percataron de que presentaba golpes en una pierna, por lo cual requería asistencia médica, pero al sitio tampoco arribaron los paramédicos para asistir al joven, quien luego de casi media hora fue atendido por sus familiares quienes al llegar lo vieron sentado en la orilla de la banqueta, dentro del agua lodosa a causa de una pertinaz lluvia que cayó.
Solución del caso
Por su parte, y al serle impedido que se retire, el oficial de la Guardia Nacional se comprometió a hacerse cargo de los gastos médicos del afectado y de la reparación de la motocicleta. Este acuerdo se dio tras dialogar con los parientes del muchacho, quienes decidieron no interponer denuncia ante las autoridades ministeriales.
El elemento de seguridad lamentó que un descuido haya sido la causa del accidente que no pasó a mayores, mientras algunos testigos mencionaron que una de las principales causas de percances automovilísticos, aunado al exceso de velocidad, es que las calles están en pésimo estado y al llover impidió percatarse del hueco.
Luego de apalabrar el acuerdo ambas partes se retiraron, al joven lo trasladaron al Hospital General, y la moto quedó bajo resguardo de los conocidos para, posteriormente, llevarla a reparar a un taller mecánico. Es de mencionar que los implicados esperaron un rato más en el sitio a la policía, pero al final no tuvieron éxito.
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AA