El filósofo esloveno Slavoj Zizek indicó que la película insta a realizar acciones inmediatas para cambiar la situación actual. Opinó que el foco de la historia no son los problemas de una persona concreta, sino “la desesperación” del actual orden político.
Ciudad de México, 5 de noviembre (RT).– El filósofo esloveno Slavoj Zizek afirmó a RT que la nueva película de Todd Phillips que cuenta la historia de Joker , icónico rival de Batman, en realidad expone la imperfección social del sistema moderno e insta a hacer cambios radicales al respecto.
Incluso antes de su estreno, la obra provocó preocupaciones de que el comportamiento de su protagonista pudiera provocar una ola de violencia entre los espectadores. Sin embargo, el reconocido filósofo opina que el foco de la historia no son los problemas de una persona concreta, sino “la desesperación” del actual orden político.
En ese contexto, recogió las declaraciones del director de cine Michael Moore, que calificó el filme de una representación de la realidad de las personas pobres y sin asistencia sanitaria en EU. “Su idea es que la película explica cómo figuras como Joker pueden surgir. Es una representación crítica de la realidad en EU, que puede dar a luz a gente como Joker”, declaró.
Al mismo tiempo, Zizek expresó la opinión de que Joker se convirtió en una imagen del “nihilismo extremo”. “Creo que lo importante es que la figura de Joker al final, cuando se identifica con su máscara, es una figura del nihilismo extremo , la violencia autodestructiva y la risa loca de la desesperación de otros”, indicó.
De acuerdo con sus afirmaciones, el episodio de la película, cuando otras personas elogian a Joker, muestra “el estancamiento final del sistema existente” y “la sociedad [que está] empeñada en su autodestrucción”.
LA NECESIDAD DE CAMBIOS RADICALES
Zizek indicó que la película insta a realizar acciones inmediatas para cambiar la situación actual. “La elegancia de esta película es que nos deja el siguiente paso para crear una alternativa positiva. Es una imagen del nihilismo oscuro destinado a despertarnos”, afirmó.
El filósofo precisó que la situación requiere “cambios radicales” y que “la insatisfacción que crece hoy es seria”. “El sistema no puede lidiar con ella con unas reformas graduales, una mayor tolerancia o una mejor atención sanitaria”, reiteró.
Al final, Zizek volvió a hacer referencia a las declaraciones de Moor de que la gente se está preocupando por los episodios de violencia en el cine, pero no de los de la vida real. “Mostrarse sorprendido por la violencia representada en la película es solo una huida de la violencia real”, concluyó.