MADRID, España, 2 de diciembre (AFP).- Cuesta encontrar en el diccionario los calificativos para Leo Messi, cuya leyenda no para de agrandarse y este lunes añadió otro capítulo histórico al convertirse en el único jugador en tener seis Balones de Oro.
Diez años después de su primer Balón dorado en 2009, el capitán del Barcelona se hizo con su sexto galardón, superando al defensa del Liverpool Virgil Van Dijk (segundo) o su adversario histórico, Cristiano Ronaldo (tercero).
El astro argentino deja atrás al luso, poseedor de cinco Balones de Oro, pero también a otras leyendas del fútbol como Johan Cruyff, Michel Platini o Marco Van Basten con tres.
“Leo lo ilumina todo”, decía a mediados de noviembre el técnico del Barcelona, Ernesto Valverde, sobre su capitán, que parece seguir mejorando, según van pasando los años desde que debutara en partido oficial con el Barça en octubre de 2004.
Fue imprescindible para que el Barça ganara en mayo la Liga 2018-2019, apenas unos días después del nacimiento de su tercer hijo, Ciro, y pese a que el equipo azulgrana no pasó de semifinales en la Liga de Campeones y perdió la Copa del Rey contra el Valencia, Messi, siguió sumando récords.
Pieza básica
Volvió a ser máximo goleador de la Liga con 36 goles para ser el primer jugador en conseguir seis Botas de Oro, otra vez por encima de las cinco de Cristiano Ronaldo y, de paso, marcó su gol 700 con la camiseta azulgrana en las semifinales de la ‘Champions’.
A sus 32 años, sigue siendo la pieza imprescindible de un Barça, que depende de sus goles, sus pases y su visión de juego.
“El que más ha marcado la diferencia ha sido Leo, aparece solo en una jugada y te la mete”, decía el domingo el centrocampista del Atlético de Madrid, Saúl Ñíguez, última víctima del rosarino (1-0), que mantiene a su club líder del campeonato español.
De perfil bajo y habitualmente parco de palabras, Messi ha multiplicado sus declaraciones desde que se enfundara el brazalete de capitán que dejó vacante Andrés Iniesta en 2018, en un nuevo paso en su club de toda la vida al que arribó en 2001.
En la Masía, el famoso centro de formación del Barça, Messi se forjó como futbolista, al tiempo que continuaba con un tratamiento que había iniciado en su Rosario natal para tratar un problema de falta de la hormona del crecimiento.
En los últimos 15 años y en 701 partidos con la camiseta azulgrana, Messi lo ha ganado todo convirtiéndose en el jugador barcelonista con más títulos.
En su palmarés figuran 4 ‘Champions’ (2006, 2009, 2011, 2015), 10 Ligas, 6 Copas del Rey, 8 Supercopas de España, 3 Supercopas de Europa y 3 Mundiales de Clubes.
Argentina, su espinita
De paso también ha ido coleccionando récords individuales: mejor goleador histórico del Barcelona (614 goles), también lo es del campeonato español (428) desde que en 2014 superara el récord que 60 años antes había establecido el mítico delantero vasco Telmo Zarra con 251 tantos.
En la pasada temporada, también igualó a Zarra en el número de trofeos ‘Pichichi’ al máximo goleador de la Liga con seis reconocimientos (2010, 2012, 2013, 2017, 2018, 2019).
Al pequeño jugador argentino, casado con Antonela Roccuzzo, con la que tiene tres hijos, sólo le queda la espinita de la selección argentina, a la que el otro astro argentino Diego Armando Maradona había llevado a la cima en el Mundial de 1986.
Ganador del oro olímpico en Pekín-2008, Messi no ha repetido con la Albiceleste, con la que ha jugado cuatro mundiales desde Alemania 2006, siendo probablemente lo más doloroso la derrota frente a Alemania (4-0) en la final de Brasil-2014.
La Copa América también es una cuenta pendiente en la lista de Messi con las finales perdidas en Venezuela-2007 contra Brasil o contra Chile en 2015 y 2016, además de caer en cuartos en 2011 con Uruguay o en semifinales con Brasil en 2019.