MONTERREY, Nuevo Leon, 30 de abril (NTX).- La posibilidad de revancha llegó para Monterrey, que buscará este miércoles doblegar a Tigres en la Concachampions, para llevarse el título en la segunda final regiomontana.
En el Torneo de Apertura 2017 de la Liga MX se disputó la primera final entre estos conjuntos y en ese enfrentamiento los dirigidos por el técnico brasileño Ricardo “Tuca” Ferretti se llevaron la corona al conseguir el triunfo por 3-2 en el marcador global.
Ahora, Rayados y Tigres aspiran el título en la Liga de Campeones de la Concacaf y el equipo del técnico uruguayo Diego Alonso está en ventaja, luego que en el partido de ida ganaron por 1-0.
Será a partir de las 21:00 horas cuando Monterrey reciba a los de la UANL, que intentará superarlos en el global para obtener el título y su boleto para el próximo Mundial de Clubes.
Rayados tratará de obtener el título ante Tigres para conseguir así su cuarta corona dentro de la Liga de Campeones de la Concacaf; lo logró en las ediciones 2010-2011, 2011-2012 y 2012-2013, cuando era dirigido por el timonel Víctor Manuel Vucetich.
Para los felinos, esta final también representa una revancha, dado que llegarán con la mira puesta en coronarse por primera vez en este torneo en su historia, luego que se han quedado a un paso de conseguirlo.
La primera ocasión que llegaron a la última instancia fue en 2016, en la que se cayeron ante América; en 2017 de nueva cuenta se colocaron en la final, pero volvieron a perder, esa vez ante Pachuca, bajo el mando de Diego Alonso.
En este compromiso los Tigres tendrán prácticamente a su plantel completo, dado que podrá regresar a la actividad el defensa Luis Rodríguez, quien se perdió el de ida por suspensión, y la única baja es la del colombiano Julián Quiñones por lesión.
André-Pierre Gignac podría arrancar como titular para el partido de vuelta, aseguró Ricardo Ferretti, técnico de los Tigres.
“Ha mejorado su estado físico. Jugó contra Puebla los 90 minutos y está para ser tomado en cuenta (para ser titular)”, mencionó Ferretti, quien dejó entrever que será decisión técnica si el francés arranca el juego.
Sin embargo, el delantero no vive el mejor momento, víctima de la lesión que sufrió en la rodilla y que lo apartó intermitentemente de las canchas desde febrero y definitivamente desde los primeros días de marzo. Fue hasta el partido del 21 de abril pasado que pudo volver a jugar.