El piloto fue nombrado caballero este día, como parte de la lista de honores difundida por la Reina Isabel, que reconoce a los artistas, políticos, servidores públicos y otras personas. Particularmente, los honores de este año se dirigieron a quienes trabajaron en la lucha contra el coronavirus y su impacto devastador.
Hamilton, quien conquistó en noviembre su séptimo título de la F1 para igualar el récord de Michael Schumacher, dijo que parte de su éxito reciente estuvo inspirado en el movimiento Black Lives Matter. El piloto de 35 años puso una rodilla en tierra y utilizó en su indumentaria consignas contra el racismo durante la temporada.
“Hubo una fuerza diferente a la que me había impulsado en el pasado”, dijo Hamilton la semana pasada a la BBC. “Quería llegar primero al final de las carreras, para utilizar esa plataforma” contra el racismo.
Algunos sugirieron que Hamilton pudo ser nombrado caballero antes, de no ser por su estatus fiscal. El honor se le otorgó en la sección de la lista correspondiente a logros en el extranjero, puesto que reside en Mónaco, un país con bajos impuestos.
Los asuntos tributarios de Hamilton llegaron a la prensa en 2017, cuando la fuga de documentos conocida como Paradise Papers mostró que el piloto evadió el pago de más de 4 millones de dólares en impuestos sobre un jet privado que se registró en la Isla de Man, un paraíso fiscal.
David Richards, presidente del consejo de Motorport U.K., dijo que el estatus fiscal de Hamilton fue “totalmente malinterpretado”. Añadió que el astro del automovilismo figura entre los 5 mil mayores contribuyentes de Reino Unido.
Con información de AP