Juan Diego Casanova Medina
Si bien algunos países han suspendido su actividad deportiva para evitar que la pandemia del Covid-19 continúe con su devastador paso, la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, por sus siglas en francés) hace caso omiso a las disposiciones sanitarias para evitar contagios y se mantiene firme en realizar el Torneo de Candidatos al título mundial de Ajedrez, que se celebrará el próximo 17 de marzo en Ekaterimburgo, Rusia.
La disposición ha generado controversia en el universo de las 64 casillas porque los protocolos que conlleva el inicio y el final de las partidas, vulnera las normas para evitar contagios.
Tanto hombres como mujeres acostumbran estrechar la mano de su oponente antes de comenzar las partidas, como lo establece el código de ética de la FIDE, y lo mismo sucede cuando concluye el juego.
La misma situación se presenta cuando el jugador claudica al ver que no tiene posibilidades de rescatar la igualada y extiende su mano en señal de rendición para estrechar la mano de su victimario.
Otro contacto con las manos se da en las tablas, cuando ambos contendientes acuerdan la tregua, a propuesta de cualquiera de ellos, quedando de común acuerdo con la división del punto.
Derivado del ciclo de contactos manuales, antes, durante y después de las partidas, provocó, en las circunstancias actuales, que uno de los 8 Grandes Maestros clasificados al Torneo de Candidatos, renuncie a disputarle la corona al campeón noruego Magnus Carlsen.
Aunque la FIDE, en un comunicado, informó que la renuncia del azerbaijano Temour Radjabov se debió “por motivos personales”, lo cierto es que el jugador desmintió la versión al afirmar que la verdadera causa era el temor al coronavirus. El francés Maxime Vachier-Lagrave, quien presentaba el mejor ranking entre los no clasificados al Torneo, tomó su lugar.
Durante el Torneo, la FIDE pondrá en práctica medidas de higiene, como por ejemplo, dejar en libertad a cada jugador para estrechar o no la mano de su adversario y no incurrirán en descortesía si deciden no hacerlo.
Otra disposición será la distancia entre el público y las mesas donde jugarán las partidas que será de 15 metros. Si bien es cierto que los contactos directos entre los jugadores son opcionales, tampoco están previstos los contactos inevitables con las piezas que también se tocarán en los intercambios.
Entre los jugadores que buscarán desafiar al monarca noruego en la competencia que se desarrollará del 17 de marzo al 3 de abril, en el hotel Hyatt Regency de Ekaterimburgo, se encuentra el estadounidense Fabiano Caruana, quien fue el último retador de Carlsen; los rusos Ian Nepomniachtchi, Alexander Grischuk y Kirill Alexseenko; el francés Vachier-Lagrave y el holandés Anish Giri.
Completan la lista los jugadores de China, el foco de la epidemia que se ha extendido por todo el planeta, Ding Liren y Wang Hao.