El agente Scott Boras recomendó a su clientela no aceptar más recortes en sus sueldos y que sean las organizaciones quienes absorban esa pérdida
NUEVA YORK, EE.UU., 28 de mayo (AP).- El agente Scott Boras recomendó a sus clientes que rechacen el intento de las Grandes Ligas por reducir los salarios, durante las negociaciones con el sindicato de peloteros.
Boras consideró que los problemas financieros provocados por la pandemia de coronavirus encuentran también su origen en la financiación de deuda de los clubes.
En un correo electrónico obtenido por The Associated Press, Boras escribió que los jugadores no deben permitir que se alteren los términos del acuerdo que alcanzaron el 26 de marzo con las Mayores. Ese pacto contemplaba que los peloteros vieran reducidos sus salarios sobre una base prorrateada dependiendo de cuánto se abreviara la campaña.
El martes, las Grandes Ligas propusieron una serie de reducciones estratificadas. Bajo este esquema, los astros mejor remunerados sufrirían los mayores recortes.
“Recuerden, los juegos no pueden realizarse sin ustedes”, escribió Boras. “Los peloteros no deben acceder a más recortes en la paga para rescatar a los dueños. Dejen que los dueños tomen parte de los ingresos y ganancias sin precedentes, que han obtenido en los últimos años, y les paguen los salarios prorrateados a los que accedieron, o que pidan dinero prestado, dando como garantía los valores generados a partir del uso de esas ganancias que produjeron los jugadores”.
Boras es el agente más conocido del béisbol, y representaba a 71 peloteros en activo o en las listas de lesionados hasta el 31 de agosto. Ninguna otra agencia tenía a tantos representados.
Los salarios fluctúan entre el mínimo de 563,500 dólares y los 36 millones que iban a devengar en este año Mike Trout y Gerrit Cole. Este último pelotero es cliente de Boras.
Según el acuerdo de marzo, los sueldos hubieran ido de unos 285,000 dólares a 18 millones por una campaña regular de 82 juegos propuesta por las Mayores. Pero la oferta económica planteada esta semana por las Grandes Ligas reduciría los salarios a entre 262.000 y 8 millones de dólares, incluida la repartición de bonos que todos los peloteros obtendrían si alcanza a disputarse la postemporada.