Los tiempos de la "nueva normalidad" son extraños incluso en las presentaciones de los futbolistas de la Liga MX. José Ignacio Rivero debutó con el Cruz Azul antes de dar su primera conferencia de prensa como jugador celeste.
"Tuve nervios pero me divertí dentro del campo y, con el paso de los partidos, me iré acomodando mejor a la idea de los compañeros y del técnico [Robert Dante Siboldi]", comentó el uruguayo sobre su estreno de ayer como cementero en la Copa por México. Rivero, proveniente del Tijuana, realizó un entrenamiento previo con el resto de los jugadores de La Máquina, ya que no podía integrarse por no firmar contrato. El torneo amistoso le permitió debutar pronto.
Este mediodía, el charrúa habló por primera vez como jugador del Cruz Azul -con la misma promesa que los otros que han sido contratados desde 1997- tras su estreno sobre la cancha.
Nacho puede jugar como mediocampista o lateral, una destreza que lo ha caracterizado en su carrera. El mismo charrúa reconoció que no sabe bien en qué posición lo acomodará Siboldi, pero no tiene conflictos en cualquier zona mencionada.
"Tengo las característica de jugar en varias posiciones y es un medida que tiene el técnico, quien decidirá donde me colocará y yo debo cumplir en la que me toque", indicó.
Con la baja momentánea de Pablo Aguilar, quien se mantiene en recuperación tras la lesión que sufrió en la rodilla en febrero, obligaría a Robert Dante colocar a Luis Romo como defensa central, por lo que Rivero jugaría en la contención junto a Yoshimar Yotún.
"Es todo un proceso, un camino, y con la ayuda de los compañeros y técnico se pueden hacer bien las cosas. Se venía haciendo una gran labor acá, pero se canceló el torneo, hay que retomar el rumbo".
Información El Universal
Por Redacción Digital Por Esto!
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