Ilusionada de llegar a sus terceros Juegos Olímpicos, la velerista cozumeleña Demita de Lille se encuentra entrenando en tierra yucateca, la cual considera su segundo hogar.
En entrevista exclusiva para POR ESTO!, la atleta se dice preparada y lista para los Juegos de Tokio, Japón, pero a la vez no baja la guardia y sigue entrenando todos los días en las costas yucatecas.
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“Ya lo siento bastante cerca, después del aplazamiento que se dio el año pasado, ya con el boleto en la bolsa, sentía que este día no llegaría nunca, pero ya, a tan sólo cuatro meses de distancia siento que es una realidad”, expresó la deportista.
De Lille abrió las puertas de su casa en Mérida para conversar sobre su carrera, la cual ha sido muy prolífica e importante, así como su presente y futuro dentro de esta disciplina, la cual será modificada para el siguiente ciclo.
“La sensación de que no se realizarían estos Juegos Olímpicos siempre fue un factor, hace unos meses se rumoraba que se podrían cancelar, aunque yo nunca paré mi preparación, en mi mente siempre estuvo que sí se iban a hacer y seguí adelante”.
“Ahora, con la cercanía y la oficialización de que sí se realizarán, ya lo siento un hecho, más real que nunca, ya estoy en la última etapa de mi preparación, en la recta final”.
Como se informó en su momento, los Juegos Olímpicos de Tokio, el cual se debieron realizar en el 2020, fueron movidos para este 2021, debido a la pandemia de COVID-19.
“Soy de los pocos atletas que le dio alegría el cambio, afortunadamente vivo en una isla y no hay forma de cerrar las playas; aunque fueron entrenamientos en solitario, nunca paré”, dijo.
La velerista recordó que le alegró el poder tener un año más de entrenamiento, ya que poco tiempo antes había dado a luz a su primera hija, lo que la alejó de la práctica por año y medio.
“Cuando se dio la noticia del aplazamiento -afirmó- fui de las más contentas, porque ganaba un año más de entrenamiento; además, mi nena estaría más grande y así podría verme competir, ganando un año de preparación”.
Reconoció que no fue fácil regresar a la competencia, ya que con el embarazo perdió todo el nivel de años de entrenamiento, por lo que tuvo que esforzarse el doble para conseguir su meta.
“Cuando regresé a competir después de dar a luz –agregó- sentí que estaba apresurada de conseguir de nueva cuenta mi nivel, pero el cambio de fecha me dio tiempo de replantear mi macrociclo de entrenamiento y llegar en el mejor momento de mi carrera”.
Entre sus logros más importantes, además de asistir a los Olímpicos de Londres, Inglaterra 2012 y de Río de Janeiro, Brasil 2016, está el colgarse la medalla de plata en los Panamericanos de Toronto, Canadá 2015.
“En mi mente siempre ha estado la medalla, ser finalista olímpica sería un gran resultado en Tokio, estuve muy cerca el ciclo pasado de lograrlo, ahora me siento más fuerte y creo poder hacerlo, ya quiero estar ahí, que empiecen los Juegos”, comentó.
Segunda casa
Como parte de esta recta final de su preparación, aprovechando las condiciones climatológicas que imperan en nuestro estado, en especial del viento, así como el nivel de oleaje que tiene nuestro mar, decidió tomar a Yucalpetén como su centro de entrenamiento.
“Pensando en tener la mejor preparación posible hacia los olímpicos, decidimos venir a Yucatán, ya que acá se tiene condiciones de viendo magníficas y maravillosos para nuestra preparación”, explicó.
Pero antes de llegar a Tokio, estará haciendo una escala en España, donde participará en el Campeonato Mundial de Rs:x, donde se medirá con los mejores exponentes de la especialidad.
“Después de mi estancia en Yucatán, donde estaré hasta el 12 de abril, viajaré a la ciudad de Cádiz, España, para el Campeonato Mundial de la especialidad; ésta será mi última competencia antes de los Juegos Olímpicos”.
A pesar de ser originaria de Cozumel, Quintana Roo, De Lille siempre ha estado muy ligada a nuestro estado, ya que durante nueve años vivió en Mérida, donde estudió su preparatoria y su carrera en la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
“Después de tierras ibéricas regresaré a México para un campamento de entrenamiento, donde cerraremos la preparación para posteriormente viajar al Lejano Oriente”.
Junto con ella, está entrenando la selección nacional que asistirá a este evento, siendo estos Ignacio Berenguer, en Rs:x varonil, así como la dupla de Elena Oestling, en láser radial, y Juan Pérez, en finn varonil.
“El equipo nacional que está trabajando para París, Francia, se encuentra también en Yucatán, entrenando con nosotros, ellos ya están haciendo sus prácticas con el nuevo equipo que se tendrá para esa justa”, dijo.
Cabe señalar que, como parte del equipo nacional que comenzó su trabajo para tierras galas, se encuentran dos yucatecos, el cuatro veces olímpico David “Africano” Mier y Terán Cuevas, que este año no pudo calificar, y Cristóbal Hagerman Haro.
La ingeniera civil de profesión no descarta que en algún momento tome a Mérida como su residencia definitiva, en especial en el momento en que su hija entre a la preparatoria o la Universidad, como fue en su caso.
“Amo Cozumel, pero sé que, a nivel educativo, Mérida es mejor, y en algún momento mi hija vendrá a estudiar acá y sí hemos pensado establecernos en Yucatán”, reveló.
Actualmente su madre y su hermana ya tienen como residencia esta ciudad, razón por la cual aprovecha para pasar varios periodos al año en estas tierras.
Cambio de tabla
La Federación Internacional de Vela -World Sailing-, en su Asamblea General Anual, realizada en el 2019 en Bermuda, anunció oficialmente cambios en las disciplinas de vela que tomarán parte en los Juegos Olímpicos de la especialidad en París, en 2024.
Entre los cambios más fundamentales está el que dejará de existir la modalidad de Rs:x, el cual será substituido por una modalidad denominada iFoil, o tablas con alerones.
“El equipo olímpico que estará en París ya no es el mismo que el de ahora, se suponía que Tokio concluiría el año pasado y todos cambiaríamos al nuevo, iFoil, al ser olímpica, soy la única que utiliza el actual, pero para poder combinar las salidas, las regatas y la técnica necesitas gente, por lo que estoy combinando mi preparación en los dos equipos”, explicó.
Cabe señalar que el RS:X es un tipo o clase de embarcación a vela, de la modalidad de windsurf, que es clase olímpica desde los Juegos de Pekín, China 2008; mientras en el caso de iFoil, es una tabla con vela, pero tiene un alerón abajo, el cual va “pegado” al agua.
“Al principio pensaba que estos serían mis últimos Olímpicos, pero con el cambio de material, cuando me subí por primera vez a uno de estos, la sensación tan mágica y bella que es estar ahí, me decidí a continuar un ciclo más”, manifestó De Lille.
“Este nuevo equipo da unas sensaciones tan bellas, además es más rápido, hay que estar mejor preparado y más consciente de lo que se hace, en esta embarcación dependes más de la técnica que de la táctica”, indicó.
Aunque sabe que está en una situación desfavorable con respecto a los demás integrantes de la selección con esta tabla, ya piensa en llegar a París.
“Estoy rezagada en horas de entrenamiento en el nuevo equipo, ya que estoy concentrada en el antiguo, pero pasando los Juegos Olímpicos, al día siguiente, me subiré al nuevo para recuperar el tiempo”, advirtió.
Problemas con CONADE
A pesar de tener el apoyo en el material y en el viaje a Cádiz, la atleta ha sido una de las afectadas por la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) con la suspensión de sus becas deportivas.
“No ha sido el mejor año para nosotros, por ahora no contamos con beca, no sabemos qué paso, seguimos entrenando y preparándonos para representar al país, pero sin el apoyo monetario”.
La situación en la que se ha manejado la CONADE en este año ha suspendido inexplicablemente los apoyos económicos a los atletas, quienes dedican varias horas al día a sus entrenamientos, viviendo de estas becas.
“Sí me dan material y el apoyo para el Campeonato Mundial, pero no tener beca es difícil económicamente para todos, ya que de ahí sacamos para nuestra alimentación, suplementos y otras cuestiones”.
Los atletas de alto rendimiento están concentrados al 100 por ciento en sus entrenamientos, haciéndolo entre ocho y diez horas al día, lo que les impide tener otro trabajo, siendo el apoyo en becas su única entrada económica.
Vacuna
Por otro lado, a pesar de estar a unos meses de los Juegos Olímpicos, la gente de tabla-vela aún no ha sido vacunada contra el COVID-19, lo que sí ya sucedió con otros atletas.
“No nos han vacunado, no nos han dicho ni cuándo ni dónde nos la pondrán, nos vamos en unos días a España y esperamos que cuando regresemos nos la pongan”, dijo.
Cabe señalar que a los atletas que viven en el Centro Nacional de Alto Rendimiento (CNAR), en la Ciudad de México, se le está aplicando ya estas vacunas, sin embargo, la gente de tabla no tiene como sede de entrenamiento este sitio.
SY