Este sábado, a través de sus redes sociales el Real Madrid, Barcelona y Juventus, emitieron un comunicado denunciando las “inaceptables presiones y amenazas” a las que les está sometiendo la UEFA desde que anunciaron la competición, y recalcaron la “postura incoherente” de los otros nueve clubes, además de asegurar que van a “perseverar en la búsqueda de soluciones”.
“Los clubes fundadores de la Superliga han recibido y continúan recibiendo presiones, amenazas y ofensas para que abandonen el proyecto y su responsabilidad y derecho de aportar soluciones al ecosistema del futbol a través de propuestas concretas fruto del diálogo constructivo. Esto es inaceptable en un estado de derecho”, señala el comunicado conjunto de los tres equipos europeos.
Califican lo ocurrido de "inaceptable en un estado de derecho" y recuerdan que "los Tribunales ya se han pronunciado sobre el proyecto de la Superliga, ordenando a FIFA y UEFA, con rotundidad, que se abstengan mientras se tramita el procedimiento judicial, de realizar cualquier actuación que pueda penalizar a los clubes fundadores". Entienden, de esta manera, que se reconoce "la apariencia de buen derecho de dicha iniciativa".
En su comunicado, Real Madrid, Barcelona y Juventus estiman que están en su derecho de lanzar la competición afirmando que "los tribunales ya se han pronunciado a favor del proyecto de Superliga". En el fondo, los tres clubes defienden el objetivo de su iniciativa, "aportar soluciones a la situación insostenible que atraviesa actualmente la familia del fútbol" por lo que "reformas estructurales son indispensables".
La UEFA anunció el viernes una serie de sanciones, principalmente económicas, a los nueve clubes que anunciaron su retirada (Tottenham, Arsenal, Manchester City, Manchester United, Chelsea, Liverpool, Atlético Madrid, Inter Milan y AC Milan), tras un acuerdo en el que se "disculparon" y reconocieron "un error".
Los nueve clubes 'arrepentidos' deberán principalmente renunciar al 5% de los ingresos por su participación en las competiciones europeas durante una temporada, además de hacer una donación "agregada" de 15 millones de euros para las "comunidades locales" del fútbol europeo.
AR