Roberto "Piojo" Alvarado, jugador del Club Deportivo Guadalajara, ofreció disculpas públicas tras un incidente ocurrido en las instalaciones de Verde Valle, donde un explosivo lanzado por él cayó en la sala de prensa del club. El hecho, que inicialmente fue descrito como una "broma" entre compañeros, generó malestar entre los representantes de los medios de comunicación presentes y se convirtió rápidamente en noticia nacional.
El incidente tuvo lugar este jueves 3 de octubre de 2024, en vísperas del Clásico Tapatío contra el Atlas. Según los reportes, Alvarado lanzó un objeto conocido como "barreno" o petardo, que explotó cerca de la puerta de la sala de prensa donde se esperaba la conferencia de Fernando Beltrán y José Castillo. La explosión aturdió a varios presentes, incluyendo a Miguel González, camarógrafo de Milenio Guadalajara.
¿Por qué se fue la prensa de Verde Valle?
Inicialmente, se escucharon risas de varios futbolistas desde la zona de vestidores, lo que llevó a algunos reporteros a abandonar la sala en señal de protesta. Antonio "Pollo" Briseño intentó mediar la situación, pero la identidad del responsable no fue revelada en ese momento.
Consciente de la gravedad del asunto, Roberto Alvarado tomó la iniciativa de dar la cara. El jugador solicitó una reunión con la prensa que permanecía fuera de Verde Valle para ofrecer sus disculpas y aclarar lo sucedido. En su declaración, Alvarado expresó que la intención era jugar con sus compañeros y que el explosivo no estaba dirigido a la sala de prensa.
Las disculpas de Piojo Alvarado
"Me siento apenado por lo sucedido", expresó Alvarado durante su disculpa. "Nunca fue mi intención causar daño o asustar a nadie. Entiendo la seriedad de mis acciones y asumo la responsabilidad por ellas".
El departamento de prensa del club estuvo presente durante la reunión, respaldando la iniciativa de Alvarado de aclarar la situación. Tras escuchar las explicaciones y disculpas del jugador, los representantes de los medios aceptaron sus palabras, aunque el incidente ya había generado considerable atención mediática.
Este evento ocurre en un momento delicado para Chivas, a solo días del importante Clásico Tapatío contra el Atlas, programado para el sábado 5 de octubre en el Estadio Akron. Además, el equipo enfrenta rumores sobre la posible salida del entrenador Fernando Gago al Boca Juniors, lo que añade tensión al ambiente del club.
El incidente y la posterior disculpa de Alvarado plantean cuestiones sobre la relación entre jugadores y prensa, así como sobre la responsabilidad de los futbolistas en su comportamiento fuera del campo. También subraya la importancia de la gestión de crisis en el fútbol moderno, donde las acciones dentro y fuera del terreno de juego están bajo constante escrutinio.
AG
