Las esperanzas de Chivas por repatriar a Orbelín Pineda en este mercado invernal se han desvanecido tras la decisión final del AEK de Atenas de retener al mediocampista mexicano hasta el verano de 2025.
La negociación experimentó varios giros inesperados, con el dueño del club griego, Marios Iliopoulos, modificando su postura en múltiples ocasiones. Inicialmente se mostró reacio a cualquier negociación, posteriormente pareció ceder ante las gestiones del club rojiblanco, para finalmente cerrar definitivamente la puerta a una transferencia inmediata.
Esta decisión obliga al Rebaño Sagrado a replantear su estrategia de refuerzos para el Clausura 2025, necesitando ahora buscar alternativas para fortalecer su plantel. Por su parte, el "Maguito" deberá completar la temporada en la liga griega antes de poder considerar un posible retorno a México.
La situación refleja la complejidad de las negociaciones internacionales y deja a Chivas sin uno de sus objetivos principales para este periodo de transferencias.