Es atrevida, talentosa y le habla a Estados Unidos con su flow 2.0. A los 26 años, Cardi B, una exestríper que se convirtió en una verdadera estrella en el mundo del hip-hop, conmovió el domingo en los Grammy a un público que conocía más su faceta picante desplegada en Internet.
Visiblemente emocionada, la rapera de Nueva York ascendió a otro nivel de notoriedad el domingo por la noche en Los Ángeles al subir al escenario a recibir el primer Grammy de su carrera, el premio más importante de la música estadounidense.
Al convertirse en la primera mujer que gana, en solitario, el Grammy por el mejor álbum de rap, Cardi B deja un poco más su impronta en la historia de hip-hop.
“Los nervios son tan malos, tal vez necesito empezar a fumar yerba”, dijo al micrófono provocando sonoras risas entre el público, antes de enumerar una larga lista de agradecimientos.
La reina del hip-hop también contó la carrera contrarreloj que tuvo que hacer para concluir este primer álbum, Invasion of Privacy, cuando supo que estaba embarazada de su primera hija, Kulture, nacida en julio de 2018.
Y acto seguido se dio vuelta hacia Offset, el rapero del grupo Migos, padre de su hija y con el que está otra vez en pareja después de una breve separación: “Tú, gracias”.
Una loca con uñas largas
Cardi B comenzó a desarrollar su popularidad en redes sociales como Instagram. Belcalis Almanzar, su nombre real, era entonces estríper y hacía videos virales sobre temas que iban desde la descripción de las cualidades de un amante hasta la cadena de restaurantes de panqueques IHOP.
Pero fue su participación en el programa Love & Hip Hop lo que la hizo despegar. “Puede que me conozcas como esa bailarina molesta que está en las redes sociales hablando como una loca con uñas largas y busto grande, pero soy una chica normal del Bronx”, dice en uno de los videos.
Así, esta hija de padre dominicano y madre trinitaria saltó al estrellato. En 2015, dejó el estriptis y probó suerte con el hip-hop, una apuesta audaz dada su falta de experiencia. Pero su sentido de la puesta en escena, su carisma y su acento del Bronx calzaron como anillo al dedo.
Después de lanzar algunos mixtapes, encontró un gran éxito con su megahit 2017 Bodak Yellow, una canción premonitoria con ritmos deslumbrantes cuyas letras giran en torno a su pasado.
El tema llegó a la cima de la lista Billboard, por delante de la princesa del pop Taylor Swift.
Cuando lanzó su álbum Invasion of Privacy en 2018, las críticas cálidas y el éxito comercial le dieron un lugar en este mundo del hip-hop todavía dominado por hombres.
Invasion of Privacy
Cardi B también demostró ser una verdadera experta en rap, resultado de estudiar el trabajo de sus predecesores.
En su primer álbum de estudio se encuentran invitados prestigiosos músicos como Chance the Rapper, el cantante SZA o el trío de Atlanta Migos.
Su personalidad extrovertida, su tendencia al drama y los vaivenes de su romance con Offset hacen las delicias de cierta prensa.
¿Sus temas favoritos? El orgullo de ser mujer, el éxito, el dinero y los placeres de la vida. “I like boardin’ jets, I like mornin’ sex” (“Me gusta viajar en jets, me gusta el sexo por la mañana”) dice en su último éxito, Money, que interpretó en la gala de los Grammy en un traje ajustadísimo con estampado de leopardo.
El clip de este tema, audaz y provocativo, ha perturbado Internet. En él se la ve amamantando, tocando el piano desnuda o bailando en la barra de un club de estriptis mientras mujeres lanzan billetes.
La superestrella debería volver con un nuevo álbum en 2019, impulsado por un efervescente éxito.
Una cosa es cierta: las redes sociales son parte de su ADN. Ya sea para atacar con vehemencia a Donald Trump, como lo hizo en un monólogo durante el “cierre” del gobierno, o para compartir sus momentos de “privacidad”.
“Después de una semana de decir solo ‘papá’, ella dijo ‘mamá’”, contó el domingo por la noche después de los Grammy en Instagram, posteando un video de su pequeña. Una nueva recompensa para una noche ya movida. LOS ÁNGELES, EE.UU. (AFP)