Un fotógrafo belga de la vida silvestre, Yves Adams, viajó durante dos meses en una expedición a la isla Georgia del Sur, una isla del Atlántico Sur, donde captó a este inusual ejemplar emplumado.
El fotógrafo se mostró sorprendido de encontrar a este extraño pingüino amarillo en medio de 120 mil pingüinos rey con tonos tradicionales.
“Gané la lotería de la naturaleza al ver el pingüino rey más hermoso y tomarle fotografías. Este pingüino rey caminó directamente en nuestra dirección en medio de un caos lleno de elefantes marinos, de lobos marinos antárticos y de otros pingüinos rey”. ¡Qué suerte tuve!, escribió el fotógrafo.
El inusual pigmento amarillo del pingüino se debe a un fenómeno llamado leucismo, que se asemeja al albinismo, pero en este caso le da a un tono crema al plumaje de los pingüinos, manteniendo el color original de sus ojos.
El leucismo es provocado por un gen recesivo que hace que las células ya no creer melanina. El hallazgo llamó la atención de los expertos en el mundo animal. Tal es el caso del investigador Daniel Thomas, quien le dijo al Smithsonian Insider:
“Los pingüinos usan el pigmento amarillo para atraer a sus parejas [...]. Es distinto de cualquiera de las cinco clases conocidas de pigmentación del plumaje aviar y representa una nueva sexta clase de pigmento de plumas. Por lo que sabemos, la molécula es diferente a cualquiera de los pigmentos amarillos que se encuentran en la dieta de un pingüino".
Con información de Excélsior
GCS