Una de las presentaciones como parte de la gira "Perrísimas", realizada entre Paulina Rubio y Alejandra Guzmán volvió a dar de qué hablar, aunque está vez la controversia no estuvo entre ellas.
La controversia se presentó, luego de que "La Chica dorada" pararó de manera abrupta uno de sus conciertos en Phoenix, Arizona, para evidenciar que uno de los elementos de seguridad que se encontraban en el lugar la había tocado indebidamente.
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Todo sucedió el pasado 18 de mayo, cuando Rubio, en un momento de la noche, decidió bajar del escenario para poder cantar con su público el tema "Nena", que hizo a dueto con Miguel Bosé.
Sin embargo, la cantante interrumpió la música para denunciar la presunta agresión de la que había sido víctima por parte de un guardia, a quien además le recriminó por faltarle al respeto, en lugar de protegerla.
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"Paren la música, paren la música", dijo en inglés, para después dirigirse directamente al sujeto: "señor, usted me tocó. Usted me tocó y eso está mal porque es la seguridad. Qué pena por usted. Él me tocó y es guardia de seguridad".
Todo quedó grabado en un video que ya circula en las redes sociales, hecho que ha dividido las opiniones entre los usuarios que defienden que haya levantado la voz y los que afirman que el ataque jamás ocurrió y solo lo habría hecho para llamar la atención. Aunque hasta el momento, no se sabe si tomaron cartas en el asunto.
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JAL