ANTIGUA GUATEMALA, 16 de noviembre (EFE/AP/EFE/ REUTERS).- Iberoamérica apostó por la participación de las mujeres en todos los ámbitos para contribuir al desarrollo de la región, durante la XXVI Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno, concluida hoy aquí, y en la que no hubo ninguna presidenta.
La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, la única mujer con rango de jefa de Estado en este foro, aseguró que el organismo que dirige “ha apostado por las mujeres” en sus primeros cuatro años como titular.
La diplomática y economista costarricense instó a los 22 países representados en la reunión a reforzar su lucha por la equidad de género y contra la violencia, a la vez que anunció la elaboración junto a ONU Mujeres de un informe que precise las barreras legales de los países que impiden el empoderamiento económico de las mujeres.
La Secretaria consideró “intolerable” que aún haya legislaciones nacionales que impidan a las mujeres desarrollar ciertas profesiones así como que “en todas partes persista la brecha salarial en trabajos de igual valor”.
En esa misma línea, el rey de España, Felipe VI, afirmó que la comunidad iberoamericana “no puede entenderse sin las mujeres”.
El mandatario peruano, Martín Vizcarra, destacó la necesidad de aplicar políticas para la erradicación de la violencia de género e impulsar la igualdad entre hombres y mujeres.
Por su lado, el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, pidió acciones que “resulten en el empoderamiento real de niñas, jóvenes y mujeres en múltiples campos de acción que van desde la educación, la ciencia, la política y el mundo del empleo”.
La XXVI Cumbre Iberoamericana se celebró en un antiguo convento de la época colonial, Santo Domingo del Valle, reconvertido en hotel y que alberga varios museos. Contó con la presencia de 14 de los 22 jefes de Estado convocados y tres vicepresidentes, los demás estuvieron representados por sus cancilleres. Entre las ausencias notables se incluyeron las de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Situación migratoria
La igualdad de género fue uno de los grandes asuntos abordados por los líderes de esta Cumbre Iberoamericana, junto a la situación migratoria y el desarrollo sostenible, que también serán reflejados en la declaración final de la cita así como en los comunicados especiales.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, pidió hoy a las naciones iberoamericanas fidelidad al Acuerdo de París “porque el planeta y la vida se agotan” y exhortó a esta comunidad a abordar el problema de la migración desde el enfoque de los derechos, ya que “ninguna persona es ilegal”.
Según el gobernante indígena, “el intervencionismo, las guerras genocidas y los efectos del cambio climático” son algunas de las causas por las que millones de personas han sido desplazadas “por la fuerza” de sus países de origen.
Recordó que miles de personas procedentes de Centroamérica se aproximan a las fronteras de Estados Unidos “buscando mejores condiciones vida” y exhortó a los países, ante este escenario, a “abordar la migración con un enfoque basado en los derechos de los migrantes”, quienes “no pueden ser considerados ilegales, porque no existen seres humanos ilegales”.
Morales llamó a las naciones de la región a ratificar la Convención sobre la Protección de los Derechos de los Trabajadores Migrantes como “señal concreta de que la comunidad iberoamericana defiende los derechos” de estos.
El presidente de Guatemala y anfitrión de la cita, Jimmy Morales, se refirió también a la crisis migratoria centroamericana en la apertura de los debates al instar a los países a que no se continúe “hablando de muros sobre fronteras” y a centrarse en que las personas “encuentren oportunidades en sus países de origen”.
Por su parte, el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, pidió que la Cumbre “contribuya a la paz y a la reconciliación” e instó a los mandatarios de la región a gobernar para todos los ciudadanos y evitar la polarización.
En tanto, el mandatario salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, pidió a Iberoamérica consensuar una estrategia “ejemplar y ambiciosa” para mitigar los efectos del cambio climático.
Cuba defiende médicos
Cuba reivindicó hoy la labor de sus médicos en Brasil, de donde el Gobierno de la isla ha decidido retirar a sus más de 11,000 colaboradores sanitarios del programa “Más Medicos” en respuesta a las exigencias del presidente electo del país suramericano, Jair Bolsonaro.
El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, que representó a su país en la XXVI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno de Antigua (Guatemala), agradeció en su intervención la cariñosa acogida de los brasileños a los médicos a los que ahora despiden “víctimas de la manipulación política”.
En los últimos cinco años han prestado servicio en Brasil 20.000 médicos cubanos -el 62% mujeres- que atendieron a 113 millones de pacientes, garantizaron la totalidad de la atención básica en 1,100 municipios y que no estuvieron “en grandes ciudades, sino allá donde otros médicos no han ido nunca”, señaló el canciller.