BEIRUT, Libano, 20 de octubre (AP).- Decenas de miles de manifestantes de todas las edades se reunieron en las principales ciudades y localidades del Líbano el domingo para exigir el fin de la corrupción y del mandato de la élite política del país. Cada hora, cientos de personas se sumaban en las calles para las movilizaciones contra el gobierno más grandes hasta ahora en los cuatro días de protestas.
Los manifestantes bailaron y cantaron en las avenidas, con algunos que ondeaban banderas libanesas y coreaban “el pueblo quiere derrocar al régimen”. Por la mañana, jóvenes con bolsas azules limpiaban las calles de la capital Beirut, recogiendo basura que había quedado de las protestas en la víspera.
Las protestas multitudinarias y espontáneas son las más grandes en el Líbano en cinco años y se han propagado más allá de Beirut. Avivaron el antiguo descontento hacia una clase gobernante que se ha perpetuado en el poder y acumulado riqueza durante décadas, pero que ha hecho poco para arreglar una economía en ruinas y una infraestructura deteriorada.