Jerry Chun Shing Lee habría recibido "cientos de miles de dólares" dólares por sus acciones. No obstante, su defensa sostiene que la sentencia se basó en evidencia circunstancial y especulaciones.
(RT).- Un exoficial de la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA) fue sentenciado a 19 años de prisión este 22 de noviembre por conspirar para transmitir secretos de defensa a China. Con esta decisión, Jerry Chun Shing Lee , se convierte en el tercer agente retirado de ese organismo en ser condenado en menos de un año por el mismo delito, señaló el Departamento de Justicia estadounidense en un comunicado.
La sentencia considera probado que Lee recibió "cientos de miles de dólares" dólares por divulgar "información sensible" —alguna de ella altamente secreta — de la agencia de inteligencia norteamericana. Los fiscales revelaron un registro financiero que mostraba que la cifra superaba los 840.000 dólares , informó NBC News.
De acuerdo con documentos oficiales, el hombre dejó la CIA en 2007 después de 13 años de servicio y se mudó a Hong Kong (China). En 2010 fue contactado por dos oficiales de inteligencia chinos, que le ofrecieron 100.000 dólares y una protección "de por vida" a cambio de información que había obtenido mientras trabajaba en la agencia.
Las autoridades basaron sus acusaciones en dos libretas encontradas en 2012, aparentemente escritas por Lee, con información clasificada, incluidos los nombres verdaderos y números telefónicos de agentes encubiertos de la CIA, anotaciones operativas de sus reuniones y de su localización, así como la ubicación de instalaciones encubiertas.
El acusado había sido interrogado por el FBI en varias oportunidades, en las que negó cualquier vinculación con agentes chinos y la autoría de las notas halladas. Sin embargo, luego de su arresto en 2018 se declaró culpable de "conspiración".
¿Evidencia circunstancial?
Respecto a la sentencia, los abogados de Lee consideran que se basó en gran medida en evidencia circunstancial y en especulaciones, al tiempo que cuestionaron que el comportamiento del acusado fuera tan grave como lo describe la Fiscalía.
Asimismo, la defensa argumenta que nunca hubo una explicación convincente de la procedencia del dinero ni se probó que procediera de la Inteligencia china o que su defendido hubiese llevado a término algún plan para entregar secretos del Gobierno a entes extranjeros, recoge el diario The New York Times.