Internacional

Papa expresa su pena insoportable por los casos de abusos

CIUDAD DEL VATICANO, 7 de marzo (EFE).- El Papa Francisco expresó hoy su “dolor y pena insoportables” por los casos de abusos que cada día aparecen en los medios de comunicación de todo el mundo, durante un encuentro con el clero de Roma en la basílica de San Juan de Letrán.

“El pecado nos arruina y sufrimos como una humillante experiencia cuando nosotros mismos o uno de nuestros hermanos sacerdotes u obispos cae en el abismo sin fondo del vicio, de la corrupción o, peor aún, del crimen que destruye la vida de los demás”, reconoció en el acto, a puerta cerrada y del que informó la Santa Sede.

Las palabras del Pontífice se producen mientras trata de afrontar las crisis de abusos sexuales a menores y su encubrimiento por parte de sacerdotes, que han salpicado incluso a altos jerarcas como el cardenal australiano George Pell, hallado culpable en su país.

El último caso surgió este jueves, con la condena a seis meses de prisión al cardenal francés y arzobispo de Lyon, Philippe Barbarin, por encubrir casos de pederastia y ha avanzado que renunciará a su cargo ante el Papa.

Dirigiéndose al clero de Roma, del que es obispo, Francisco dijo: “Quiero compartir con vosotros el dolor y la pena insoportables que causan en nosotros y en todo el cuerpo eclesial la ola de escándalos que llenan los periódicos de todo el mundo”.

El Pontífice considera “evidente” que “el verdadero significado de lo que está ocurriendo debe buscarse en el espíritu del mal, del Enemigo, que actúa con el pretexto de ser el patrón del mundo”, pero animó a los sacerdotes a “no desanimarse” ante estos escándalos.

El Papa aseguró que el Señor está salvando “de la hipocresía, de la espiritualidad de las apariencias” a la Iglesia, su “esposa” que, dijo, “ha sido sorprendida en flagrante adulterio” con estos casos.

“¡No nos desanimemos! El Señor está purificando a su Esposa y nos está convirtiendo a todos. Nos está haciendo experimentar esta prueba para que comprendamos que sin él somos polvo”, exclamó.

Agregó que “nuestro humilde arrepentimiento, que sigue silencioso con lágrimas ante la monstruosidad del pecado y la insondable grandeza del perdón de Dios, este humilde arrepentimiento es el inicio de nuestra santidad”.

Visita a un campo de refugiados

Francisco visitará un campo de refugiados en Bulgaria durante la visita que realizará a este país y Macedonia del 5 al 7 de mayo.

El Papa vuelve así con este viaje a mostrar su acercamiento con los ortodoxos, la religión mayoritaria en estos dos países, pero además no dejará de lado una de las preocupaciones de su pontificado: la cercanía a los inmigrantes y el llamamiento a la acogida.

Según el programa, el Papa además de las visitas de cortesía a los presidentes, mantendrá sobre todo reuniones de carácter ecuménico.

En Sofía, donde ha entrado en vigor una ley de cultos que ha causado el descontento de todas la confesiones, se reunirá con el patriarca ortodoxo búlgaro y visitará las tumbas de los santos Cirilo y Metodio en la catedral de San Alexander Nevsky.

Al ser domingo, rezará el Ángelus para la minoría católica que representa el 1 % de la población.

El 6 de mayo, Francisco visitará a primeras horas de la mañana un campo de refugiados en Sofía y después viajará a la ciudad de Rakovsky para celebrar una misa y dar la primera comunión a algunos niños.

Por la tarde, de nuevo en Sofía, participará con miembros de las varias confesiones en una oración por la paz en la plaza Nezavisimost.

El último día, Francisco viajará a Skopj, en la República de Macedonia del Norte, donde visitará el museo dedicado a la Madre Teresa de Calcuta, ya que allí nació la santa, y se encontrará con un grupo de pobres.

También celebrará un encuentro ecuménico con los jóvenes y los religiosos católicos en este país.

Escándalo acaba con uno de los cardenales más poderosos

El cardenal francés Philippe Barbarin, uno de los prelados con más poder y adalid de las tesis más conservadoras en el seno de la Iglesia católica, dimitió este jueves tras ser condenado en Francia por haber ocultado durante años casos de pederastia en su diócesis de Lyon (este).

Sentenciado a seis meses de cárcel exentos de cumplimiento y a pagar un euro simbólico a las víctimas, el cardenal anunció que en los próximos días presentará su renuncia al Papa Francisco.

Los abogados de Barbarin anunciaron que recurrirán la sentencia, que consideran que “hace portar a un solo hombre el peso de todas las sospechas que pesan sobre la Iglesia”.

Los jueces consideraron probado que el cardenal conocía los abusos denunciados por numerosas víctimas del padre Bernard Preynat, capellán de campamentos de “scouts” en los años 70 y 80.

“Al querer evitar el escándalo (...), el cardenal prefirió tomar el riesgo de impedir el descubrimiento por la justicia de numerosas víctimas de abusos sexuales e impedir la expresión de su dolor”, reza el fallo.

Los jueces no tuvieron en cuenta las alegaciones de su defensa de que muchos de esos hechos habían prescrito y que no había elementos suficientes para dar por sentados otros, argumentos también abrazados por la Fiscalía, que no pidió pena alguna contra el cardenal.

La sentencia es una victoria para la asociación “La palabra liberada”, que durante años reunió los diferentes testimonios y peleó para obtener una sentencia contra el silencio de la iglesia.