La Habana, Cuba.- (Por Pelayo Terry Cuervo, especial para Por Esto!) En medio del incremento de la hostilidad del gobierno de Estados Unidos contra Venezuela, las autoridades cubanas no descansan en manifestar el más irrestricto apoyo al presidente constitucional Nicolás Maduro y a la Unión Cívico-Militar del país sudamericano.
En los últimos días, el canciller cubano ha venido haciendo declaraciones en la red social Twitter en apoyo a la Revolución Bolivariana, en lo que se va convirtiendo en una práctica habitual de los máximos dirigentes del gobierno y el Estado cubanos.
En esa misma línea, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, un impulsor del empleo de las nuevas tecnologías en la lucha ideológica y mediática actual, continúa utilizando a diario esa plataforma para fijar posturas del gobierno sobre determinados tópicos nacionales o internacionales.
Durante la jornada del jueves, el mandatario de la mayor de las Antillas expresó en Twitter su repudio a la decisión de Estados Unidos de extender por un año una orden ejecutiva que llama a Venezuela una amenaza.
Manos fuera de Venezuela, demandó Díaz-Canel; #Venezuela jamás ha sido una amenaza para ningún pueblo del mundo, señaló y externó el rechazo a la decisión del gobierno de los #EEUU de extender por un año la orden ejecutiva que califica a Venezuela de amenaza inusual y extraordinaria contra la seguridad estadounidense.
Durante las últimas semanas el presidente cubano ha realizado múltiples exhortaciones a respetar la soberanía, la autodeterminación y el orden constitucional en la nación sudamericana, que se encuentra bajo presiones económicas y políticas por parte de Washington y sus aliados en la región y el resto del mundo.
El entonces presidente estadounidense, Barack Obama, firmó en marzo del 2015 la orden ejecutiva que señala a Venezuela como una amenaza para la seguridad de su país, la cual fue renovada por el actual mandatario Donald Trump, en su desenfrenada carrera contra la nación latinoamericana, cercada además tras las recientes sanciones a ciudadanos y empresas, y la congelación de activos financieros que suman miles de millones de dólares.