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Alfredo García “America primero”

El presidente de la megaempresa “América primero”, Donald Trump, está interesado en comprar la isla de Groenlandia a Dinamarca.

El asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, declaró el pasado domingo que el presidente Trump quiere “echar un vistazo” a una posible compra de Groenlandia. “No quiero predecir un resultado, solo digo que el presidente que sabe una o dos cosas sobre la compra de bienes raíces, quiere echar un vistazo a una compra de Groenlandia”, aseguró Kudlow a la cadena Fox News.

Según el periódico The Washington Post, en la Casa Blanca ya se ha examinado la legalidad de la supuesta compra, del proceso para incorporar a Estados Unidos un territorio con su propio gobierno y de donde saldrá el dinero para adquirir la isla.

Groenlandia es una enorme isla situada entre el océano Atlántico y el océano Glacial Ártico con un territorio de 2,166,086 km2, más del 77% cubierto de hielo y casi 57 mil habitantes, perteneciente al Reino de Dinamarca.

En el año 986 fue colonizada por poblaciones de origen nórdico procedentes de Islandia. A principios del siglo XVIII, la helada isla pasó a depender del reino de Dinamarca y Noruega, hasta la Constitución de Dinamarca en 1953.

Durante la II Guerra Mundial, EE.UU. ocupó Groenlandia hasta 1945. El presidente, Harry Truman, ofreció a Dinamarca en 1946, sin éxito, 100 millones de dólares para comprar la isla. En 1951 EE.UU. construyó la estratégica Base Área de Thule. En 1979, Dinamarca le concedió la autonomía a Groenlandia y en 2008 transfirió la mayor parte de sus competencias al gobierno local groenlandés, dejando a cargo de Dinamarca asuntos exteriores, seguridad, política financiera y el derecho a la autodeterminación.

La isla posee ricos yacimientos minerales como uranio, aluminio, níquel, platino, tungsteno, titanio y rubí, así como grandes reservas de petróleo en aguas costeras.

La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, declaró: “Groenlandia no está en venta. Groenlandia no es danesa, es groenlandesa. Espero de verdad que no sea nada que se haya dicho en serio” (…) “Es una discusión absurda y Kim Kielsen (presidente groenlandés) ha dejado claro que no está en venta. Y ahí termina la discusión. En cambio hay muchas otras cosas de las que queremos hablar con un presidente estadounidense”, dijo ayer por la televisión pública danesa Frederiksen, refiriéndose a la relación entre ambos países en cuestiones relacionadas con el Ártico.

La declaración oficial fue precedida por una lluvia de reacciones que tomó la intención de compra como broma, mientras algunos acusaron a Trump de “colonialista” y otros dudaron sobre su estado de “salud mental”.

Trump tiene programado visitar Dinamarca el 2 y el 3 de septiembre próximo, según confirmó la Casa Real danesa, pero ayer el inmobiliario presidente declaró que su viaje al país nórdico “no es del todo seguro” generando dudas. “Partimos de la base de que habrá una visita del presidente estadounidense y estamos en marcha con los preparativos. Espero con ilusión la visita, EU es nuestro principal aliado en cuestiones de seguridad”, respondió con optimismo Frederiksen.

Hoy se comprende mejor el significado del proyecto chauvinista, proteccionista y racista, “América primero”, del presidente Trump. Según la prestigiosa escritora norteamericana, Sarah Chuchwell, la consigna “América primero” usada desde principios del siglo XX para identificar el “aislacionismo” por unos y el “proteccionismo” por otros en la contienda electoral de EU, pronto devino en sinónimo de “estadunidense puro”, convirtiéndose en 1921 en el lema del Ku Klux Klan.

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