LA HABANA, Cuba, 15 de enero (Por Pelayo Terry Cuervo, especial para Por Esto!).- El proceso de normalización con la emigración es continuo, irreversible y permanente, aseguró este miércoles el director del Departamento de Atención a la Comunidad Cubana Residente en el Exterior (DACCRE), Ernesto Soberón Guzmán.
El funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de la mayor de las Antillas ratificó que la IV Conferencia La Nación y la Emigración, continuidad del diálogo de 1978 impulsado por el líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, el cual inició un proceso de acercamiento entre Cuba y la comunidad cubana en el exterior, se celebrará del 8 al 10 de abril de 2020, en La Habana.
En declaraciones al diario Juventud Rebelde, Soberón aseguró, al referirse a las afectaciones ocasionadas a la emigración por las nuevas medidas de Trump, que esta política de confrontación sólo la favorece un sector minoritario, pero extremadamente reaccionario, de la comunidad cubana en EEUU pues la mayoría de la comunidad cubana en Estados Unidos rechaza la política agresiva del presidente Donald Trump.
Explicó que las medidas y cambios regulatorios que afectan de manera más significativa a la comunidad cubana residente en el exterior, particularmente la radicada en territorio estadounidense, están relacionadas con restricciones de viajes, limitaciones a los servicios consulares en ambas capitales y reducciones en el monto de las remesas.
La eliminación de los vuelos comerciales y chárter a los aeropuertos cubanos, con excepción del Aeropuerto Internacional José Martí, en la capital, afecta a esos cubanos que viajan a Cuba y su destino no sólo se limita a La Habana, sino que desean visitar también otras provincias del país, ya sea por motivos familiares o de otra clase, señaló Soberón.
En cuanto a las limitaciones de los servicios consulares, el director del DACCRE aseguró que han generado obstáculos que dificultan el normal flujo migratorio entre Cuba y Estados Unidos, así como los viajes familiares entre ambos países, y precisó que el cierre de la oficina consular de Estados Unidos en La Habana trajo como consecuencia el encarecimiento de los trámites migratorios, pues los ciudadanos cubanos que deseen acceder a un visado para viajar a Estados Unidos deben trasladarse a un tercer país para solicitarlo, lo que genera un gasto adicional y hace prácticamente inviable el proceso.