Alfredo García
Mientras la incertidumbre económica global aumenta por la pandemia del coronavirus, algunos se aprovechan. El senador republicano Richard M. Burr fue acusado de “tráfico de información privilegiada”, tras la venta de acciones de su propiedad por valor de cientos de miles de dólares, mientras aseguraba que Estados Unidos estaba “mejor preparado que nunca” para enfrentar el virus. Como presidente del Comité de Inteligencia y miembro del Comité de Salud del Senado, Burr recibe informes clasificados sobre las amenazas sanitarias a los EE.UU..
Según el informe de transacción de acciones de Burr, él y su esposa vendieron 33 acciones diferentes el pasado 13 de febrero con un valor total de entre 600 mil y 1.7 millones de dólares, mientras la Administración Trump minimizaba la amenaza del virus antes de la caída del mercado de valores. Desde 2012, el Congreso exige a sus miembros informar sobre sus ventas de acciones, para evitar que los legisladores usen información privilegiada para obtener beneficios.
Para Paul Krugman, ganador del Premio Nobel de Ciencias Económicas 2008, “la evidencia sugiere que (Trump y su equipo) no querían hacer o decir nada que pudiera bajar los precios de las acciones, lo que parece considerar como la medida clave de su éxito. Es presumiblemente por eso que el 25 de febrero Larry Kudlow, el economista jefe de la Administración, declaró que EE.UU. había “contenido” el coronavirus y que la economía estaba “aguantando bien”.
Zach Hudson, vocero de American Bridge, un grupo de defensa demócrata, declaró: “El senador Burr necesita renunciar de inmediato. Su conducta, tal como se detalla en este informe, representa una grave violación de la confianza del público y debe rendir cuentas por su comportamiento que parece criminal”.
Tucker Carlson, un presentador de la conservadora Fox News, también criticó a Burr.
Trascendió que no es la primera vez que Burr protege sus acciones de valores. En 2009 el senador republicano admitió en un discurso, cómo después de conocer por parte del Secretario del Tesoro, Henry M. Paulson, las dificultades para mover dinero entre bancos, llamó a su esposa y le ordenó retirar la mayor cantidad de efectivo de sus cuentas.
La inescrupulosa picardía del senador republicano se produce en medio del cierre de industrias y despido de empleados que han elevado en EE.UU. las solicitudes de beneficios por desempleo en 33% la pasada semana.
Para detener las pérdidas de empleos los senadores republicanos presentaron el pasado jueves un plan que incluye préstamos a grandes corporaciones y pequeñas empresas, recortes de impuestos corporativos y cheques de hasta 1,200 dólares por adulto a individuos que ganan menos de 99,000 dólares al año, mientras uno de los mayores bancos de inversión de EE.UU., el Bank of America, anunció la existencia de una grave crisis financiera en la nación norteamericana, provocada por la propagación del coronavirus y el colapso en los precios del petróleo.
“Declaramos oficialmente que la economía estadounidense ha caído en recesión, uniéndose al resto del mundo y esta es una reducción muy profunda”, aseguró en un informe Michelle Meyer, principal analista del Bank of America, tras asegurar: “Estados Unidos enfrenta un aumento del desempleo, una caída brusca en la confianza del consumidor y la desaparición casi total de los ahorros de la población”.
Según Meyer, “de acuerdo con los resultados del segundo trimestre de 2020, la economía de EE.UU. colapsará en un 12% del PIB trimestralmente y para fines de año disminuirá en un 0.8%, mientras la tasa de desempleo crecerá en aproximadamente un millón de personas al mes durante el segundo trimestre de 2020, para alcanzar un total de 3.5 millones de personas”.