China está probando cinco vacunas contra el Coronavirus en humanos
WASHINGTON, EE.UU./PEKIN, China/MOSCU, Rusia, 15 de mayo (AFP/AP/EFE/REUTERS).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró optimista el viernes sobre la posibilidad de contar con una vacuna contra la COVID-19, asegurando que espera que esté lista para fin de año o “quizás antes”.
“Estamos buscando tenerla para fin de año si podemos, quizás antes”, dijo Trump, al informar sobre la carrera en el país para desarrollar una inmunización.
Estados Unidos es el país más afectado del mundo por la pandemia del nuevo Coronavirus, con 1,4 millones de contagios y unas 87,000 muertes desde que se registró el primer deceso vinculado al virus a principios de febrero.
A la pregunta de cómo se puede lograr una vacuna en un plazo tan acotado, Trump respondió que se iniciaron los trabajos en enero cuando se tuvo la secuencia genética del virus.
La proyección de Trump es más optimista que la de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), que el jueves dijo que una vacuna podría estar lista en un año en un “escenario optimista”.
Trump también anunció que nombrará a Moncef Slaoui, el exjefe de vacunas de la farmacéutica GlaxoSmithKline, y al general del Ejército de cuatro estrellas Gustave Perna para dirigir la denominada “Operación Velocidad de la Luz”.
“Mi gobierno está otorgando aproximadamente 10,000 millones de dólares para apoyar un esfuerzo de investigación médica sin paralelo”, dijo, comparando la búsqueda de la vacuna contra la COVID-19 con el Proyecto Manhattan durante la Segunda Guerra Mundial que llevó al desarrollo de armas nucleares.
Trump agregó que cuando la vacuna esté lista, los militares se encargarán de distribuirla, y evocó un espíritu de cooperación global.
Expectativas moderadas
Los científicos han advertido que, a pesar de los esfuerzos mundiales, es posible que nunca se encuentre una vacuna efectiva contra la COVID-19, o que algunas vacunas puedan ser contraproducentes y hacer que las personas sean más, no menos, propensas a infectarse.
Trump también trató de moderar las expectativas, señalando que combatir el nuevo Coronavirus no es un tema “únicamente de vacunas”.
“Otras cosas nunca han tenido una vacuna y desaparecen. Así que no quiero que la gente piense que todo depende de una vacuna, pero una vacuna sería algo formidable”, afirmó.
Hasta ahora no se ha desarrollado una vacuna exitosa para ningún tipo de Coronavirus que infecte a los humanos.
“Estamos de regreso”
Más allá de la carrera para obtener una vacuna contra la COVID-19 lo antes posible y que “millones de estadounidenses tengan acceso rápido a ella”, Trump destacó que Estados Unidos está listo para reabrir su economía, severamente golpeada por la paralización generalizada de las actividades desde mediados de marzo para evitar los contagios.
“Quiero ser claro: vacuna o no, estamos de regreso”, afirmó, en alusión al desescalamiento de las restricciones en curso en el país.
“Queremos ver a nuestro país comenzar a trabajar nuevamente. Nosotros creamos la mejor economía de la historia del mundo y lo vamos a volver a hacer. Van a comenzar a verlo en el cuarto trimestre o incluso antes”, aseguró Trump, que busca la reelección en noviembre.
Pero los últimos indicadores muestran que la principal economía del mundo está en muy mal estado y puede que no se recupere rápidamente, incluso cuando se levanten las medidas de confinamiento de la población.
El discurso de Trump fue interrumpido por las bocinas de camioneros estacionados desde hace varios días cerca de la Casa Blanca para exigir una revalorización de la tarifas de transporte de carga.
China: cinco vacunas
China está probando en humanos al menos cinco vacunas experimentales contra el nuevo Coronavirus, en un contexto de competencia internacional entre laboratorios, indicó este viernes el viceministro de Sanidad.
Para proteger a los chinos y acallar las críticas occidentales sobre su gestión de la epidemia, China alienta a los organismos públicos y a las compañías privadas a acelerar las investigaciones.
“En conjunto los progresos avanzan”, gracias a una buena cooperación entre servicios de sanidad, hospitales y institutos de investigación, dijo Zeng Yixin, viceministro de Sanidad.
“2,575 voluntarios en total fueron vacunados en el marco de los diferentes proyectos” y “no se registró ningún efecto indeseable importante”, dijo Zeng en una rueda de prensa en Pekín.
No habló sin embargo de fechas de comercialización de una posible vacuna, aunque dijo que la “fase 2” de todos los ensayos clínicos se terminará en julio.
La fase 2 es la segunda de tres fases de test en humanos que hay que cumplir antes de la comercialización.
Actualmente hay cinco proyectos en curso, frente a los cuatro que se conocían.
La Academia Militar de Ciencias Médicas del ejército chino, en colaboración con la compañía CanSino BIO, trabaja en una vacuna que utiliza un adenovirus, es decir un virus-vector para hacer entrar el patógeno en el cuerpo.
Los otros cuatro proyectos conciernen vacunas más clásicas, que contienen una versión sin activar del patógeno (en este caso el nuevo Coronavirus Sars-Cov-2) administrada para provocar una reacción en el paciente.
Dos de los proyectos son iniciativa de un gigante del sector farmacéutico, China National Biotec Group (CNBG), uno de ellos en colaboración con el Centro Chino de Control y Prevención de Enfermedades y el otro con el Instituto de Virología de Wuhan.
Fue en esta ciudad de centro de China donde apareció por primera vez el Coronavirus el año pasado.
La compañía farmacéutica Sinovac, con sede en Pekín, trabaja en su propia vacuna. No se conoce el nombre del organismo que está llevando a cabo el quinto proyecto.
Según el viceministro, las autoridades podrían dar el visto bueno en junio a otros test en humanos.