Este sábado, las Fuerzas Armadas de Colombia capturaron al capo, Dairo Antonio Úsuga, alias "Otoniel", el narcotraficante más buscado en tierras colombianas, acusado del envío de grandes cargamentos de cocaína a Estados Unidos y de decenas de crímenes como máximo líder del Clan del Golfo.
El "Otoniel", de 50 años, era el narcotraficante más buscado de Colombia y por quien el Gobierno de Estados Unidos ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares por información que permitiera su ubicación.
Gracias a la detención del ‘Otoniel’ terminó una persecución de cinco años por tierra, mar, aire y ríos, en la que participaron miles de efectivos de la Policía Nacional y de las Fuerzas Militares.
“Este es el golpe más duro que se le ha propiciado al narcotráfico en este siglo en nuestro país. Este golpe solamente comparable con la caída de Pablo Escobar en los años 90”, dijo el presidente Iván Duque en declaración pública tras la captura.
“Asesino de policías, de soldados, de lideres sociales. Además, reclutador de menores, se conoce también por esa demencia lo llevo a abusar de manera recurrente de niños, niñas y adolescentes. No solamente estaba en el cartel de los más buscados por narcotráfico, reclutamiento, sino también por abuso de menores”, agregó el mandatario colombiano.
El Clan del Golfo es una temida banda dedicada al narcotráfico y a la extorsión. El grupo, antes conocido como Clan Úsuga, tiene entre sus líderes a exnarcotraficantes y exparamilitares y nació tras la desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), grupo paramilitar de extrema derecha, en el año 2006.
RM