Este miércoles, Francia recuperó una parte de esa añorada "normalidad" tras la pandemia del COVID-19, con la reapertura de bares, restaurantes y centros culturales, por lo que se estarán implementando restricciones de forma gradual para evitar un rebrote del virus.
Como parte de la primera frase del plan, el toque de queda comenzará a las 21:00 horas, y no a las 19:00 como hasta ahora, y los museos, teatros y cines reabrirán sus puertas, como las áreas exteriores de restaurantes y bares.
Noticia destacada
Francia prohíbe el lenguaje inclusivo, lo considera un obstáculo para la educación
El presidente del país, Emmanuel Macron, fue uno de los primeros en sentarse en la terraza de un café, donde fue visto charlando con otros clientes y con el primer ministro, Jean Castex, quien más tarde asistió a la proyección de una película en un cine.
El gobierno ha puesto también serias limitaciones a cuanta diversión se puede tener. Los restaurantes podrán llenar sus terrazas al 50%, con no más de seis personas por mesa. Los cines limitarán su aforo al 35% de su capacidad y los museos deben restringir las entradas para que haya 8 metros cuadrados (86 pies cuadrados) por visitante.
Francia no es el primer país europeo que empieza a recuperar algo parecido a la vida social y cultural. Italia, Bélgica y Hungría, entre otros, ya permiten cenas al aire libre y en el Reino Unido se puede empezar a beber y comer en el interior de los pubs desde el lunes.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
AR