Rusia disparó más de 20 misiles de crucero y dos drones contra Ucrania a primera hora del viernes y mató a al menos 23 personas, la mayoría cuando dos de los proyectiles alcanzaron un edificio residencial en el centro del país, dijeron las autoridades. Entre los fallecidos había tres niños.
La ofensiva incluyó el primer ataque contra la capital, Kiev, en casi dos meses, aunque no se informó de ningún objetivo alcanzado. La fuerza aérea ucraniana interceptó 11 misiles de crucero y dos aviones no tripulados sobre la ciudad, dijo el gobierno municipal.
Pero en Uman, a unos 215 kilómetros (134 millas) al sur de Kiev, dos misiles de crucero impactaron contra un edificio residencial de nueve plantas. Quince personas perdieron la vida, incluyendo dos niños de 10 años, explicó el Ministerio del Interior. Además, 17 personas resultaron heridas y tres menores fueron rescatados de entre los escombros, apuntó la policía nacional. Nueve personas fueron hospitalizadas.
El bombardeo no afectó a zonas próximas a las extensas líneas del frente ni a las zonas de combate activo del este, donde se libra una guerra de desgaste. En los 14 meses desde el inicio de la invasión, Moscú ha lanzado frecuentes ataques con misiles de largo alcance que suelen alcanzar zonas civiles indiscriminadamente.
Una de las víctimas mortales era una mujer de 75 años que estaba en su apartamento en un inmueble próximo y sufrió una hemorragia interna por la onda expansiva, de acuerdo con el personal de emergencias presente en el lugar.
Tres bolsas para cadáveres yacían junto al edificio, del que seguía saliendo humo horas después del ataque. Soldados, civiles y equipos de emergencias buscaban más víctimas entre los escombros mientras los residentes sacaban sus pertenencias.
La ofensiva se produjo luego de que la OTAN dijo que sus miembros han entregado más del 98% de los vehículos de combate prometidos a Ucrania, lo que reforzó las capacidades de Kiev mientras contempla la posibilidad de lanzar una contraofensiva.
DL