Un hombre que practicaba la pesca submarina murió tras ser víctima de un ataque de tiburón en el archipiélago francés de Nueva Caledonia, en el sur del Pacífico; es el segundo en lo que va de año.
El hombre murió mientras pescaba a 500 metros de la costa de una isla aislada de la comuna de Poum, en el extremo norte de Nueva Caledonia. Un miembro de su familia trató de rescatarlo, pero sin éxito, indicó la gendarmería local. Se trata del segundo ataque mortal de tiburón en Nueva Caledonia desde el inicio del año.
Un turista australiano de 59 años murió en febrero mientras estaba bañándose en la playa de Château-Royal en Numea, la capital. En ese mismo lugar resultó herida una nadadora tres semanas antes por un tiburón de gran tamaño.
Las autoridades implementaron medidas drásticas tras estos ataques, excepcionales por su gravedad y por la zona donde se produjeron. Entre las medidas figuran la prohibición de bañarse en Numea, salvo en una zona de 200 x 20 metros que cuenta con redes de protección.
También tienen lugar matanzas de tiburones cada mes. Desde principios de febrero se mataron a un total de 82 animales. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) denunció la puesta en marcha de estas campañas.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
LG