La peregrinación anual a la ciudad santa de La Meca, conocida como 'Hach', se ha visto marcada por una trágica pérdida de vidas humanas debido a una ola de calor sin precedentes.
Al menos 550 peregrinos de diferentes nacionalidades han fallecido esta semana a causa de las altísimas temperaturas, que llegaron a alcanzar los 51.8 grados Celsius en algunos momentos, informaron diversas fuentes el miércoles 19 de junio de 2024.
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Una fuente médica, que pidió no ser identificada, declaró a la agencia de noticias Efe que la morgue de Al Muaisem, la más grande de La Meca, ha recibido hasta el momento 550 cadáveres.
No obstante, no se descarta que el número de fallecidos aumente en las próximas horas, ya que la jornada concluye hoy, poniendo fin a la peregrinación de este año.
De los fallecidos, al menos 325 eran egipcios, según la misma fuente, la mayoría debido a las extremas condiciones climáticas.
Las temperaturas, registradas por el Centro Nacional de Meteorología saudí, oscilaron entre los 45 y casi 52 grados Celsius durante las horas de mayor calor, entre las 11:00 y las 16:00.
Entre las víctimas también se cuentan al menos 60 peregrinos jordanos, una cifra superior a la reportada inicialmente por el Ministerio de Exteriores de Jordania, que había emitido 41 permisos para enterrar a sus ciudadanos en La Meca a solicitud de sus familias.
Además de estos, también se han registrado fallecidos de Túnez, Indonesia, Irán y Senegal.
Un único caso mortal fue atribuido a una estampida menor entre la multitud de peregrinos.
El incremento en el número de fallecidos egipcios se atribuye en parte a que muchos de ellos no estaban registrados oficialmente, lo que impidió a las autoridades tener constancia de su presencia y brindarles asistencia adecuada.
La delegación iraní informó de 11 muertes debido a golpes de calor y 26 personas más hospitalizadas.
Por su parte, las fuentes oficiales tunecinas confirmaron la muerte de 35 ciudadanos durante la peregrinación.
Este año, la peregrinación a La Meca, un deber religioso que todo musulmán debe cumplir al menos una vez en su vida, reunió a 1.8 millones de fieles, de los cuales 1.6 millones provenían de otros países, según datos de las autoridades sauditas.
Los visados para la peregrinación son otorgados por Arabia Saudita bajo un sistema de cuotas por país.
Sin embargo, muchos creyentes que carecen de medios para obtener estos visados llegan al lugar por sus propios medios, pero no logran acceder a las instalaciones climatizadas, exponiéndose así a los peligros del calor extremo.
La comunidad internacional y los organismos de derechos humanos han expresado su preocupación por las condiciones de seguridad y bienestar de los peregrinos, llamando a las autoridades sauditas a mejorar las medidas de protección contra el calor y a asegurar que todos los peregrinos tengan acceso a instalaciones adecuadas para mitigar los efectos de las temperaturas extremas.
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