Con un 39.3 por ciento de los votos, el partido de Narendra Modi asegura la victoria electoral en India.
Tras una década de promover su agenda nacionalista, el líder de 73 años se encamina hacia un tercer mandato, pese a las críticas de la oposición y las preocupaciones sobre los derechos de las minorías religiosas.
El Bharatiya Janata Party (BJP), liderado por Modi, y sus aliados alcanzarán 281 escaños, superando los 272 necesarios para obtener la mayoría en la cámara baja del Parlamento, según los datos de la comisión electoral anunciados el martes (4.6.2024).
Mientras avanza el recuento de votos, los principales mercados de la India registran significativas pérdidas, reflejando la incertidumbre sobre el margen de victoria de Modi, que parece más estrecho de lo previsto por las encuestas.
Desafío logístico
Un total de 642 millones de personas participaron en estos comicios, organizados en siete fases a lo largo de seis semanas, reflejando el desafío logístico de coordinar elecciones en la nación más poblada del mundo.
Durante el fin de semana, tras el cierre de los últimos colegios electorales, Modi expresó su confianza en que "el pueblo de India ha votado en números récord" a favor de su Gobierno.
La oposición apenas pudo contrarrestar la fuerza del BJP, enfrentándose a procesos judiciales que denuncian como una campaña política de Modi contra la disidencia.
La política del primer ministro también genera preocupación entre la minoría religiosa de más de 200 millones de musulmanes, quienes están inquietos por su futuro en este país constitucionalmente secular.
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