Internacional

El Kremlin reconoció este viernes que entre los prisioneros rusos intercambiados con Estados Unidos y Europa había espías, en un intento de rebajar la tensión diplomática

El Kremlin reconoció hoy, 2 de agosto de 2024, que entre los ocho prisioneros rusos intercambiados con Estados Unidos y varios países europeos había espías de los servicios secretos. Este intercambio se produce en un aparente intento de disminuir la tensión diplomática de cara a futuras negociaciones de paz para resolver la guerra en Ucrania.

Durante una rueda de prensa, el portavoz presidencial Dmitri Peskov admitió que uno de los liberados, Vadim Krásikov, es un miembro del Servicio Federal de Seguridad (FSB). Peskov también reveló que otros tres liberados eran agentes encubiertos o del espionaje militar ruso.

El presidente Vladimir Putin recibió a los espías liberados con un homenaje, calificando su regreso como "muy importante" y un tributo a aquellos que sirven a su país. "Es un homenaje a aquellas personas que sirven a su país y que, después de pruebas muy difíciles, gracias al arduo trabajo de muchas personas, pudieron regresar a la patria," declaró Peskov.

Detalles de los agentes encubiertos

Krassikov, a quien Putin abrazó al descender del avión en Moscú, fue compañero de varios guardaespaldas del presidente y miembro del grupo de élite 'Alfa' del FSB. "Desde luego, ellos le dieron la bienvenida anoche," explicó Peskov.

En declaraciones a la prensa occidental, Putin defendió el asesinato perpetrado por Krassikov, argumentando que cumplió con su deber patriótico al eliminar a un criminal vinculado con la guerrilla separatista chechena. Krassikov debió haber sido intercambiado en febrero pasado por el fallecido líder opositor ruso Alexéi Navalni, pero el canje fracasó en el último momento, según los colaboradores del político.

Otros espías liberados

Peskov también mencionó, sin dar nombres específicos, que otro de los liberados era un agente del servicio de inteligencia militar (GRU). Además, la pareja formada por Artem Dulcev y Anna Dulceva, quienes admitieron cargos de espionaje antes de ser liberados en Eslovenia, también fueron identificados como "agentes encubiertos."

IO