El presidente de China, Xi Jinping, destacó el compromiso de su país con la construcción de relaciones "saludables y sostenibles" con Estados Unidos como una prioridad en la política exterior china. Durante un encuentro con el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, Xi subrayó que tanto China como Estados Unidos deben asumir la responsabilidad histórica de ser fuentes de estabilidad para la paz mundial.
"El compromiso de China con unas relaciones estables, saludables y sostenibles con Estados Unidos sigue siendo una prioridad. Esperamos que la parte estadounidense trabaje en la misma dirección que China", declaró Xi Jinping, según un comunicado de la Cancillería china.
La reunión entre Xi y Sullivan se dio en el marco de la primera visita a China de un asesor de seguridad estadounidense en ocho años. Sullivan también mantuvo conversaciones con Wang Yi, el máximo diplomático chino, en unas negociaciones que ambas partes calificaron como "constructivas", aunque no estuvieron exentas de críticas mutuas.
Se espera que estas conversaciones puedan llevar a una llamada a nivel de líderes entre ambos países en las próximas semanas.
Sullivan destaca competencia y la necesidad de reducir riesgos
Por su parte, Jake Sullivan reconoció que la relación entre China y Estados Unidos sigue marcada por la "competencia", pero señaló que su visita contribuyó a "mejorar el entendimiento" entre las dos potencias y a "reducir los riesgos" de que las tensiones escalen hacia un conflicto.
"No hemos resuelto todas nuestras diferencias, pero se trata de gestionar la relación con responsabilidad para reducir riesgos y encontrar áreas en las que trabajar juntos", explicó Sullivan en una rueda de prensa posterior a las reuniones. Durante su estancia en China, Sullivan también se reunió con el general Zhang Youxia, vicepresidente del principal organismo militar chino.
Las conversaciones entre ambos países se producen en un momento de crecientes tensiones en varios frentes, incluyendo disputas comerciales, la situación en Taiwán, y cuestiones de seguridad cibernética, entre otros. A pesar de estas diferencias, tanto China como Estados Unidos parecen estar buscando mecanismos para evitar que su rivalidad desemboque en un conflicto directo, y las recientes reuniones son un paso en esa dirección.
IO