Marco Rubio, designado por Donald Trump como próximo secretario de Estado de Estados Unidos, aseguró que una acción militar en México para enfrentar a los cárteles es "una opción" que estará disponible para la nueva administración.
Durante su audiencia de confirmación en el Senado, el futuro jefe de la diplomacia estadounidense destacó que la preferencia sería trabajar en conjunto con México, pero reconoció que los cárteles representan una amenaza significativa para ambos países.
Rubio señaló que los cárteles tienen un control operativo sobre vastas regiones fronterizas entre México y Estados Unidos, una situación que calificó como "un hecho desafortunado".
Aunque admitió que la posibilidad de designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras es una herramienta "imperfecta", no descartó su implementación.
“Debemos perseguir a estos grupos, identificarlos y llamarlos lo que son: terroristas. Están aterrorizando a Estados Unidos con la migración masiva y el flujo de drogas”, afirmó Rubio.
Sobre el uso del ejército para combatir a los cárteles, Rubio indicó: "Es una opción disponible para el presidente Trump", aunque subrayó que su prioridad desde el Departamento de Estado sería fomentar la cooperación con México.
Tres fricciones con México
Rubio identificó tres áreas de tensión entre ambos países:
- Violaciones a acuerdos comerciales en el marco del T-MEC.
- El control del problema migratorio en la frontera.
- La violencia generada por los grupos criminales transnacionales.
Trump, quien asumirá la presidencia el 20 de enero, ha advertido sobre aranceles a México y Canadá si no se toman medidas contra el tráfico de fentanilo y los cruces fronterizos ilegales.
Además, sugirió un cambio simbólico al "Golfo de América", lo que generó críticas inmediatas desde México.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, respondió de manera irónica: “¿Por qué no le llamamos América Mexicana a Estados Unidos? ¿Se oye bonito, no?”.
IO