
Testigos presenciales lograron capturar imágenes impactantes del incidente, mostrando a los pasajeros descendiendo por las alas del avión, mientras los equipos de emergencia respondían rápidamente al lugar para controlar el fuego.
La Terminal C del aeropuerto se convirtió en centro de intensa actividad, con bomberos y personal de seguridad trabajando coordinadamente para controlar la situación y atender a los afectados.
Sin heridos graves reportados
A pesar de la magnitud del incidente y el pánico generado, las autoridades confirmaron que no se reportaron heridos de gravedad. Algunos pasajeros recibieron atención médica por inhalación de humo y crisis de ansiedad, pero todos fueron evacuados de manera segura.
Investigación en curso
Las autoridades aeroportuarias, en conjunto con la Administración Federal de Aviación (FAA), han iniciado una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas del incendio, que hasta el momento se desconocen.
El fuego comenzó poco después de que la aeronave aterrizara, lo que permitió una respuesta más rápida por parte de los equipos de emergencia del aeropuerto.
Según informaron las autoridades, los vuelos programados en el aeropuerto no se vieron gravemente afectados por el incidente, aunque se emitió un comunicado pidiendo paciencia a los viajeros mientras se completaban las tareas de limpieza y seguridad.
Adicionalmente, se realizaron protocolos de revisión para asegurar que no existiera otro peligro en la zona afectada.
Compromiso con la seguridad
Representantes de American Airlines están colaborando estrechamente con la FAA y el Aeropuerto Internacional de Denver para esclarecer las circunstancias del suceso.
Las autoridades han asegurado que se tomarán todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los pasajeros y prevenir que incidentes similares ocurran en el futuro.
Los investigadores continuarán trabajando en las próximas horas para determinar con precisión qué provocó el incendio en la aeronave.